Las bravías (Argumento)

Las bravías

Las bravías, Sainete lírico en un acto y cuatro cuadros se estrenó en el Teatro Apolo de Madrid, el día 12 de Diciembre de 1896. Sus libretistas, José López Silva y Carlos Fernández Shaw. Música de Ruperto Chapí.

Basada en la comedia de Shakespeare, La fierecilla domada. La acción del primer cuadro y la del tercero se ubican en un lavadero a orillas del Manzanares, mientras que la del segundo se lleva a una calle de Madrid y la del cuarto a Aravaca. 

Acto único

Se celebra el cumpleaños de la "Señá" Melania, dueña de la casa y casada con el señor Colás. Entre todos los asistentes se encuentra Patro, su hija. Muy hermosa aunque de carácter dominador y genio muy fuerte apenas se deja controlar por su madre. Epifanio, un joven simpático, la corteja, aunque Patro no le presta mayor atención más que la necesaria para generar celos a quien realmente le interesa, El señor Lucio, provisto de un nivel económico mucho más alto. Inteligente y consciente del modo en que Patro juega con él, a pesar de ello no se siente incómodo porque la quiere y apuesta porque en el futuro ella cambiará de carácter. Se gana el favor de los padres de Patro, que presionan a su hija para que tome partido, aunque lo único que parecen conseguir de ella es el más absoluto desprecio.
Sin embargo, una impertinencia de Epifanio, con aires castigadores, irrita a Lucio que se decide a poner orden. Tras un altercado anuncia que se quiere casar con Patro y que lo hará tarde o temprano, porque la quiere y es consciente de que ella también lo aprecia. Aunque la muchacha quiere oponerse ve frente a ella la férrea voluntad de Lucio que la acaba doblegando, hasta el punto de que no podrá resistirse a los deseos de él, llegando a la boda. Celebrada ésta, se instalan en la finca de Aravaca, que tiene Lucio, mientas en el interior de Patro se produce progresivamente el cambio previsto por el hacendado. Ambos son felices; ella porque ha descubierto al hombre que supo transformarla y él porque ha confirmado que la joven tiene un fondo estupendo y está llena de bondad. Culmina la obra con la demostración de amor mutuo.