La fiesta de San Antón (Argumento)

La fiesta de San Antón

La fiesta de San Antón, Sainete lírico de costumbres madrileñas en un acto y tres cuadros se estrenó en el Teatro Apolo de Madrid, el día 25 de Noviembre de 1898. Su libretista, Carlos Arniches. Música de Tomás López Torregrosa.

La acción se sitúa en Madrid en época contemporánea al estreno.

Acto I

Antonio, el guarnicionero, está a caballo a la puerta de la taberna e invita a todo el mundo contándoles que se ha regalado un caballo por ser el día siguiente el de su santo; es un guapo mozo de éxito con las mujeres. Actualmente pretende a la Felipa pero ha sido mucho tiempo novio de Regina que sigue enamorada de él y no se resigna a perderlo. Eusebio, dueño de la taberna, es vecino de Regina a la que conoce desde que era una niña y a la que su mujer, Genara, ha protegido desde que se quedó huérfana con un hermano que cuidar. Ella se ve muy mal de dinero pero no quiere aceptar la ayuda de Antonio que se ha ofrecido a pagarle el alquiler de la casa donde vive. Eusebio intenta aconsejar a Antonio que no deje de ese modo a Regina pero éste rehúsa escuchar aunque confiesa que no puede apartarla de su cabeza. Llega la Señá Genara indignada porque cuando iba con Regina se han encontrado casualmente con Felipa, han discutido las dos por Antonio y Felipa ha desafiado a la Regina a que hará que Antonio vaya al día siguiente, fiesta de San Antón a su casa a tomarse unas copas de vino y así todo el mundo sabrá que la quiere. Regina indignada le responde que no lo consentirá y se han enzarzado en una pelea en la que también han participado la Señá Leoncia, madre de Felipa y la Señá Genara. El Señor Ramón y la Señá Leoncia, padres de Felipa están muy interesados en casarla con Antonio que tiene mucho dinero y les librará de las deudas, pero Felipa no está muy segura de sus sentimientos y se mueve sobre todo por vanidad y por darle en la cabeza a Regina.
Se prepara una fiesta en casa de Antonio el día siguiente y cuando están todos disfrutando de ella y bebiendo aparece a la puerta Regina que reclama hablar con Antonio. Sale Felipa y Regina le ruega que deje a Antonio que le quiere de verdad pero ésta rehúsa: sale Antonio y al verse forzado por la presencia de las dos mujeres le dice a Regina que ya no la quiere y ésta se desmaya de dolor y es recogida por Eusebio.
Más tarde aparecen El Tulipa y El Mangas, torerillos de poca monta pero éste último ha sido novio de Felipa y al enterarse de que tiene otro novio decide ir a su casa a pedir explicaciones; llegan en actitud amenazante pero Ramón, padre de Felipa, consigue amedrentarles y se marchan de nuevo. Al poco se acreca Antonio con su jaca a cumplir la promesa de beber unos vinos en la taberna de Felipa, ésta sale a recibirle y se alegra pero en ese momento llega Regina que trata de impedir que él beba el vino que le da, Antonio indignado intenta pegarle con la fusta pero sale en su defensa Eusebio con una navaja. Antonio se va al galope y el resto de vecinos trata de quitarle la navaja a Eusebio. En ese momento Antonio se cae del caballo y regresa malherido traído por varias personas. Cuando le ve Regina se arroja a sus pies llorando y al abrir el los ojos le encuentra a su lado sollozando, se conmueve y le dice que ahora se da cuenta de cuánto le ama. Ramón, Leoncia y Felipa se encolerizan y se meten en la taberna en donde se introduce Genara para arrancarle un mechón de pelo a Leoncia en venganza por la pelea del día anterior.