Curro el de Lora
Curro el de Lora, Zarzuela en dos actos se estrenó en el Teatro Apolo de Madrid, el día 29 de Octubre de 1925. Sus libretistas, José Tellaeche y Manuel de Góngora. Música de Francisco Alonso.
Acto I
A mediados del siglo XIX, en el cortijo del Marqués de Azanaque, situado en las sierras de Córdoba, concluye un festivo encierro de toros. Entre la numerosa concurrencia sobresalen Lola Cortés y su amiga Trini, que son dos majas de rumbo y un grotesco personaje, Richemond, que desentona con todos los demás por sus maneras y su atavío al estilo segundo imperio. Trini cuenta un lance en el cual un garrochista la habría salvado la vida durante el acoso. Acabada la fiesta, se presenta Curro el de Lora, un célebre bandolero que, desde que se enteró de la estancia en la sierra de Lola Cortés, está pasando momento de confusión porque Lola fue la mujer por la que él asesinó a un hombre y tuvo que echarse al monte. Curro que había sido, camuflado como garrochista, quien salvó a Trini en el acoso, cuenta su historia a petición de ésta. Al final del acto, Lola y Curro se encuentran a solas, Curro confiesa su amor, pero Lola se resiste y él planea secuestrarla mientras Richemond y el resto de secundarios cantan desenfadadamente el tango del kikirikí.
Acto II
Trini y Lola han sido capturadas por los secuaces de Curro y están en la cueva del Montañés a quien Lola confiesa que nunca va a dar su querer a nadie por la fuerza. Mientras los bandoleros hacen guardia en la boca de la gruta, El Ecijano aprovecha para entrar con el fin de llevarse a Lola con él. Forcejean, Curro llega a la gruta, escucha las voces de Lola y, entrando, la libera de El Ecijano que le reta. Lola, que no quiere que se produzca el duelo, se interpone entre los dos rivales y El Ecijano se va Bravuconeando y asegurando a Curro que ya tendrán otra ocasión para batirse. A pesar del lance, Lola sigue sin confesar su cariño por Curro y le ofrece dinero a cambio de su libertad, cosa que ofende a Curro quien dice que sólo la dejará libre si vuelve con él, a lo que Lola, Obstinada, se opone mientras esté prisionera. Llega a la cueva Richemond que, siguiendo los pasos de Trini, había sido apresado por los bandidos Ronco y Petaca quienes le dejan bajo la custodia de dos viejas -María Jesús y Presumida- que le acosan cómicamente y le roban el reloj. Después se encuentra con Trini, se envalentona y la enamora. Entre tanto, El Ecijano ha amotinado a un grupo de bandidos y atenta cobardemente contra Curro, hiriéndole de una cuchillada. Al verle tan malherido, Lola confiesa su amor por él. En ese momento, llegan a la cueva los guardias que liberan a los cautivos y apresan a todos los bandoleros menos a Curro y El Montañés que escapan por una trampilla secreta. Algún tiempo después, Curro y El Montañés en una venta donde Curro confiesa que, a la vez que cicatrizó la puñalada que le dio El Ecijano, se le pasó también el mal de amores y quiere volver a organizar una partida de bandoleros. Entre toda la gitanería, contrasta cómicamente la figura típicamente gallega del ventero. El argumento se desenlaza con una escena en la mezquita de Córdoba, donde, con ocasión de la boda de Richemond y Trini, Curro sabía que iba a encontrar a Lola. Efectivamente, se produce el encuentro y se reconcilian.
No hay comentarios:
Publicar un comentario