Entre Sevilla y Triana
Entre Sevilla y Triana, Sainete lírico en dos actos se estrenó en el Teatro Circo Price de
Madrid, el día 8 de Abril de 1950. Sus libretistas, Luis Fernández de Sevilla y Luis Tejedor. Música de Pablo Sorozábal.
Acto I
Cuadro primero. Cruce de calles de Triana donde viven nuestras protagonistas Reyes con su tía viuda, la Señá Patro, y la hija de ésta, Micaela; junto a otros vecinos como el Sr. Mariano, Isidora casada con Glosopeda y otros. Destaca el Huerto de San Jacinto, donde vive el Sr. Mariano casado con la Sra. Benita, también una pequeña taberna de la que llega una copla flamenca anima la confluencia de estas calles. Primavera, las 12 de la mañana. En las primeras escenas se van desarrollando las presentaciones de los personajes y se cuenta al público el nudo argumental de la obra. Reyes ha tenido un hijo secreto de un marino del que se enamoró hace un año, Fernando. El Sr. Mariano y su mujer lo crían como propio ocultando el secreto de la protagonista a los vecinos, al menos aparentemente. José María está enamorado de Reyes pese a su secreto y a que ella sigue esperando al marino del que no ha tenido noticias en todo el tiempo. Paralelamente transcurre la historia de la segunda pareja de amantes correspondientes a la pareja cómica Micaela y Angelillo que siempre aprovechan para declararse su amor, interpretando las coplas y dúos más divertidos. En el momento que José María, herido por el rechazo de Reyes, la pone en evidencia delante de sus vecinas haciendo público lo que se rumorea por el barrio vuelve corriendo el Sr. Mariano anunciando que el barco de Fernando atraca en el Puerto de Triana en unas horas, lo que renueva todas las ilusiones en Reyes que cierra el cuadro cantando su amor.
Cuadro segundo. El puerto de Sevilla. A la derecha se adivina un puente de un barco amarrado. De fondo, vistas de la ciudad y el puente de Triana. De la cubierta del barco van desembarcando marineros encabezados por uno que toca el acordeón cantando una habanera con evoluciones coreográficas. Aparece en cubierta Fernando con el dueño del barco, Mr. Olsen. Fernando entusiasmado de volver a ver Sevilla canta una romanza.a su ciudad. Al desembarcar lejos de volver al lado de Reyes, se refugia en los brazos de otra amante, Esperanza Moreno, una folklórica del tablao.
Acto II
Cuadro tercero. El mismo lugar de acción del Cuadro primero, en Triana. De noche, se está celebrando la Cruz de Mayo en el Huerto del Señor Mariano, y por encima de la tapia sale el resplandor de las luces y la música de la fiesta. Después de un nuevo rechazo de Reyes a José María, llegan a Triana Fernando y el forastero Mr. Olden, Micaela les sale al paso y les hace entrar al Huerto. Interior del Huerto donde todos los vecinos, Angelillo, el Sr. Mariano y la Señá Patro, Isidora, etc, cantan y bailan unas sevillanas por el extranjero. Animados por la fiesta Angelillo y Micaela cantan el Zorongo coreados por todos, baile general. Fernando se va a dirigir a la casa a por Reyes cuando le sale al encuentro José María y se enfrentan. Reyes interviene dejando en evidencia a José María. Entre todos dejan solos a Fernando con Reyes gracias a la intervención de Mr. Olden. De nuevo fuera del Huerto, Fernando y Reyes cantan el dúo donde recuerdan lo que pasó y sintieron juntos hace un año. Reyes sigue ocultándole la existencia del niño para conocer las verdaderas intenciones de Fernando. Se separan al huir Reyes a su casa. La nueva amante de Fernando se encuentra con la Señá Patro y Micaela enfrentándose de nuevo, ante todos le dice a Fernando que Reyes no le ha sido fiel y que incluso se ha quedado embarazada en el tiempo que él ha estado fuera. Esa revelación hace entender a Fernando que el hijo es suyo. Mientras la música suena y Reyes canta desde su casa.
Cuadro cuarto. Puerto de Sevilla, junto al río. El mismo espacio que en el Cuadro segundo. Noche cerrada. Las luces de la ciudad brillan al fondo. La escena vacía, por la izquierda aparecen Olden y Angelillo vestido de camarero que improvisa un bar portátil. Mr. Olden ha preparado una invitación a los vecinos del barrio para despedirse ante su inminente partida. En un momento Fernando se sincera con Mr. Olden confesando que lo que él pensó que sería un amor pasajero por Reyes, siente ahora como amor verdadero. Ante la petición de Angelillo y la situación cómica de enredo planteada que se soluciona al llegar Micaela y confesar su amor recíproco, Mr. Olden decide intervenir ayudando a la pareja, actuar de “padrino” y sufragar los gastos de la boda, e incluso se ofrece a oficiar la ceremonia a bordo del barco en alta mar. Lo cual celebran cantando y bailando el dúo cómico “Me caso en la mar salá” De nuevo José María reitera su amor por Reyes en una romanza antes de enfrentarse a Fernando. Angelillo y Micaela vuelven del interior del barco. El corre a separar a los hombres y ella a consolar a su prima. Con los últimos acordes musicales de la obra reaparece Fernando para llevarse a Reyes al barco…
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