Zulema
Zulema, Zarzuela oriental en un acto se estrenó en el Teatro del Conservatorio de
México, el día 22 de Enero de 1902. Su libretista, Rubén M. Campos. Música de Ernesto Elorduy.
La acción se desarrolla en Estambul, en 1877.
Acto I
Escena primera. Zulema, llevada a la fuerza al harén, es la favorita de Selim Pachá y Muley-Hasán es un príncipe árabe convertido en esclavo a quien ama secretamente. Al alzarse el telón, Zulema ha arreglado que un batelero la lleve a un jardín al lado del Bósforo, donde encontrará a Muley. Amparados por la noche y tras soslayar el hecho de que Zulema sea parte del harén, se abandonan a una escena de pasión. Zulema informa a Muley acerca de la proclama que libera a todos los esclavos árabes que se alisten para pelear con el ejército otomano contra los rusos. A pesar de los temores de Zulema, Muley seguirá el camino de la guerra para, así, conseguir la libertad.
Escena segunda. El batelero que trasladó a Zulema la traiciona cuando se dirige al bazar en busca de Omar, oficial caído en desgracia ante Selim y a quien vende el secreto de la reunión de Zulema por veinte zequíes de oro. Al cambiar el decorado aparece Zoraida, vieja nómada que canta con voz profética a un grupo de árabes que Muley, hoy esclavo, es en realidad un príncipe y que será Rey; pero ni los árabes ni nadie, parecen escucharla. En cambio todos atienden la trágica historia de Yusuf, quien cuenta su propia desgracia: siendo señor de Salónica, una mujer le tiende una trampa y es ofuscado y trasladado a Estambul donde se le convierte en eunuco del harén. Por ello, Yusuf no irá a la guerra sino a buscar su propia venganza. Enseguida, Abdalá, otro árabe, canta unas coplas que evocan la antigua pérdida de Granada. Al finalizar la escena reaparecen Omar y el batelero, quien jura por el Corán que dice la verdad respecto al encuentro secreto de Zulema y Muley.
Escena tercera. La acción se traslada al harén. Ahí la bayaderas entonan un seductor coro para entretener a Selim. Enseguida entra Omar quien hace notar al Sultán la ausencia de Zulema y le revela el encuentro de ésta con Muley en los propios jardines del palacio. Enfurecido, el Sultán llama a sus hombres y sale intempestivo, no sin antes amenazar de muerte a Omar en caso de que éste mienta.
Escena cuarta. Nuley y Zulema continúan gozando su encuentro y cuando ven aparecer tras los árboles la luz de las antorchas, es demasiado tarde. Selim, enfurecido, ordena que acudan a él las otras mujeres del harén. Entonces, prenda por prenda y joya por joya, desviste a Zulema y reparte la ropa y joyas entre las demás. "Desnuda te compré en Monastir y desnuda te arrojo de mi serrallo", advierte. Mientras tanto Muley, también enfurecido, ha intentado golpear al Sultán. Selim, niega a Muley la aplicación del salvoconducto que le permite ir a la guerra e indica a Omar que debe matar a Muley y enseñarle, al día siguiente, el lugar donde yace su osamenta. Pero Omar ha escuchado algo de la canción de la vieja Zoraida en el bazar. Así que tras quedarse solos, pregunta a Muley si es cierto que es un príncipe árabe, convertido en esclavo. En ese momento entra Zoraida y confirma la historia. Con quinientos zequíes de oro compra la libertad de Muley quien a su vez, promete a Omar abandonar Constantinopla inmediatamente. Al finalizar la escena, Omar cuenta el oro seguro de encontrar usa osamenta en las calles de Estambul que le permita engañar al Sultán y Muley piensa en huir y en Zulema, su amor.
Escena quinta. El escenario se traslada al mercado de esclavas. Zulema llora y se lamenta de su suerte y otras esclavas hacen eco de su lamento. Pero con el primer rayo de la mañana, Muley irrumpe en el mercado, vestido de jeque y con un séquito de árabes que le siguen. Impetuoso, arroja al judío dueño de Zulema una bolsa henchida de zequíes de oro y rescata a Zulema. Juntos huyen al desierto y se reiteran apasionadamente su amor.
La acción se desarrolla en Estambul, en 1877.
Acto I
Escena primera. Zulema, llevada a la fuerza al harén, es la favorita de Selim Pachá y Muley-Hasán es un príncipe árabe convertido en esclavo a quien ama secretamente. Al alzarse el telón, Zulema ha arreglado que un batelero la lleve a un jardín al lado del Bósforo, donde encontrará a Muley. Amparados por la noche y tras soslayar el hecho de que Zulema sea parte del harén, se abandonan a una escena de pasión. Zulema informa a Muley acerca de la proclama que libera a todos los esclavos árabes que se alisten para pelear con el ejército otomano contra los rusos. A pesar de los temores de Zulema, Muley seguirá el camino de la guerra para, así, conseguir la libertad.
Escena segunda. El batelero que trasladó a Zulema la traiciona cuando se dirige al bazar en busca de Omar, oficial caído en desgracia ante Selim y a quien vende el secreto de la reunión de Zulema por veinte zequíes de oro. Al cambiar el decorado aparece Zoraida, vieja nómada que canta con voz profética a un grupo de árabes que Muley, hoy esclavo, es en realidad un príncipe y que será Rey; pero ni los árabes ni nadie, parecen escucharla. En cambio todos atienden la trágica historia de Yusuf, quien cuenta su propia desgracia: siendo señor de Salónica, una mujer le tiende una trampa y es ofuscado y trasladado a Estambul donde se le convierte en eunuco del harén. Por ello, Yusuf no irá a la guerra sino a buscar su propia venganza. Enseguida, Abdalá, otro árabe, canta unas coplas que evocan la antigua pérdida de Granada. Al finalizar la escena reaparecen Omar y el batelero, quien jura por el Corán que dice la verdad respecto al encuentro secreto de Zulema y Muley.
Escena tercera. La acción se traslada al harén. Ahí la bayaderas entonan un seductor coro para entretener a Selim. Enseguida entra Omar quien hace notar al Sultán la ausencia de Zulema y le revela el encuentro de ésta con Muley en los propios jardines del palacio. Enfurecido, el Sultán llama a sus hombres y sale intempestivo, no sin antes amenazar de muerte a Omar en caso de que éste mienta.
Escena cuarta. Nuley y Zulema continúan gozando su encuentro y cuando ven aparecer tras los árboles la luz de las antorchas, es demasiado tarde. Selim, enfurecido, ordena que acudan a él las otras mujeres del harén. Entonces, prenda por prenda y joya por joya, desviste a Zulema y reparte la ropa y joyas entre las demás. "Desnuda te compré en Monastir y desnuda te arrojo de mi serrallo", advierte. Mientras tanto Muley, también enfurecido, ha intentado golpear al Sultán. Selim, niega a Muley la aplicación del salvoconducto que le permite ir a la guerra e indica a Omar que debe matar a Muley y enseñarle, al día siguiente, el lugar donde yace su osamenta. Pero Omar ha escuchado algo de la canción de la vieja Zoraida en el bazar. Así que tras quedarse solos, pregunta a Muley si es cierto que es un príncipe árabe, convertido en esclavo. En ese momento entra Zoraida y confirma la historia. Con quinientos zequíes de oro compra la libertad de Muley quien a su vez, promete a Omar abandonar Constantinopla inmediatamente. Al finalizar la escena, Omar cuenta el oro seguro de encontrar usa osamenta en las calles de Estambul que le permita engañar al Sultán y Muley piensa en huir y en Zulema, su amor.
Escena quinta. El escenario se traslada al mercado de esclavas. Zulema llora y se lamenta de su suerte y otras esclavas hacen eco de su lamento. Pero con el primer rayo de la mañana, Muley irrumpe en el mercado, vestido de jeque y con un séquito de árabes que le siguen. Impetuoso, arroja al judío dueño de Zulema una bolsa henchida de zequíes de oro y rescata a Zulema. Juntos huyen al desierto y se reiteran apasionadamente su amor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario