EL CURITA
Zarzuela en un acto y tres cuadros.
Letra de Ventura de la Vega.
Música de Amadeo Vives.
Estrenada en el Teatro Eslava el 2 de
Abril de 1902.
REPARTO
(Estreno)
María - Srta. López Martínez.
Paquita - Srta. Ortiz.
Saturna - Sr. Traín.
Carmencita - Srta. Fraiz.
Señor Lucas - Sr. P. León.
Feliciano - Sr. Ontiveros.
El Presidente - Sr. Angoloti.
Silvio - Sr. J. León.
Mateo - Sr. Casas.
El Bastonero - Sr. Valls.
El Inspector - Sr. Angulo.
Una Voz - N. N.
Blanco y Negro - Srtas. Navarrete, B. Albalat,
M. Fraiz, M. Valero, Shaufé, Jaque, Cabrera, E. Ortiz.
Estudiantina escolar, coro general,
máscaras particulares y panderetólogos.
La acción en Madrid. —Domingo de
carnaval
ACTO UNICO
Patio de una casa de vecindad. Puerta
grande de entrada, en el toro: a la izquierda del foro, escalera que conduce al
corredor del piso principal, donde habrá una puerta y sobre ella un letrero
grande hecho a mano, que diga: «Se alquilan trajes de máscara.» En la puerta
habrá colgados dos dominós, uno verde y otro rosa. —En primero y segundo
término izquierda, puertas practicables; en la primera una muestra de
«Zapatero». En primero y segundo término derecha, puertas; y en la primera otra
muestra de «Planchadora». En la escena y cerca de la primera puerta de la
derecha, una mesa con una manta y un paño blanco, donde estará María planchando
una camisa. Cerca de la mesa, hornillo con planchas, donde está soplando
Carmencita. A la izquierda, cerca de la primera puerta, una mesilla de zapatero
con todos los utensilios necesarios para trabajar. —Alrededor de la mesilla,
tres sillas bajas donde estarán sentados trabajando, Lucas, Mateo y Silvio.
Cerca de éstos y más a primer término, Feliciano sentado leyendo «El Siglo futuro».
En el centro y más a segundo término, Paquita y Saturna, sacudiendo el polvo a
una prenda cualquiera de mujer. —Es de día. —Derecha é izquierda la del actor —Epoca
actual (La del estreno).
ESCENA PRIMERA
María, Carmencita, Paquita, Saturna, Lucas,
Silvio, Mateo y Feliciano.
(Música)
MARIA
Anda, Carmencilla,
menea el soplillo,
que se está apagando
el pícaro hornillo.
A ver si aligeras
y soplas con alma,
porque necesito
muy pronto las planchas.
LUCAS
(Levantándose y acercándose a donde está
María)
Si quié usté que la ayude,
vecina mía,
verá usté como soplo
con maestría.
MARIA Agradezco, vecino,
su buena intención.
Ya hace tiempo sabía
que era usté un soplón.
SILVIO
Vuelva usté por otra.
LUCAS
(Volviendo a su asiento)
¡No se pué ser fino!
MATEO
Machaque usté suela.
LUCAS
Pues venga el martillo
y darme la piedra.
SILVIO
Ahí lo tiene usté. (Dándole lo que pide)
MARIA
(Por Feliciano)
(Ni una vez siquiera
me ha mirao el gaché)
LUCAS
Oído, muchachos:
Allá va una copla.
El bonito tango
de Aplanchadora.
(Lucas llevando el compás con el
martillo sobre la piedra)
Plá, plá, plá.
SILVIO y MATEO
(Llevando el compás con las chavetas
sobre las tenazas, como si afilaran)
Chiquichí, chiquichí, chiquichí,
chiquichí, chiquichí, chiquichí,
chiquichá.
LUCAS
Yo conocí hace tiempo
a una señora.
MATEO y SILVIO
Chiquichí.
LUCAS
Que se gana la vida
de planchadora.
MATEO y SILVIO
Chiquichí.
LUCAS
Y plancha las pecheras
con tanto brillo,
que se miran en ella
los señoritos.
Se pasa tó el día
la ropa planchando,
y en cuanto anochece
ya lo está dejando.
En vez de camisa
debiera planchar...
MATEO y SILVIO
¿El qué?
LOS TRES
Chiquichí, chiquichí,
chiquichí, chiquichí,
chiquichí, chiquichí.
¡Já, já!
LUCAS
¡Plá, plá, plá!
MATEO y SILVIO
Chiquichí, etc.
MARIA
Yo conocí hace poco
a un caballero.
MATEO y SILVIO
Chiquichí.
MARIA
Que se gana la vida
de zapatero.
MATEO y SILVIO
Chiquichí.
MARIA
Que si hace un par de botas,
que es cosa rara,
las hace con el cuero
que tié en la cara.
Y como tó el día
está machacando,
al llegar la noche
ya se va cansando.
Gracias que su esposa
le suele ayudar...
LUCAS
¿A qué?
TODOS
Chiquichí, chiquichí,
etc., etc.
¡Já, já!
(Hablado)
LUCAS
¡Parece que le ha escoció a usté la
copla, señá Mariquita!
MARIA
¡Quién hace caso de medios días!
PAQUITA
(Estos acaban por pelearse)
MARIA
¡Pero usté también ha llevao lo suyo!
¡Se habrá usté quedao tan tranquilo! Abusa usté de mí porque soy una señora
sola y porque ve usté que con tanto... hombre como hay en el patio, no hay
ninguno que sea capaz de defenderme. Por eso está usté siempre tirándome
puntaditas que atacan a mi honradez.
LUCAS
¿A su honradez? (Cantando el morrongo de
«Enseñanza libre.»)
¡Ay qué fino, ay que fino,
el pelito que tiene el minino!
MARIA
(Furiosa) ¡Ea, se acabó! (Se lanza sobre
Lucas)
SATURNA
(Sujetándola) ¡Tranquilícese usté!
MARIA
¡So indecente!
LUCAS
¡Miau!
MARIA
¡Déjeme usté!
PAQUITA
(Sujetándola y llamando) ¡Feliciano!
CARMENCITA
(Habrá cogido una plancha, con el agarrador,
de las que están el hornillo y se la da a María) ¡Tírele usté la plancha, que
está caliente!
LUCAS
(Levantándose y escondiéndose detrás de
los oficiales)
¡Cuidado, eh!
MARIA
¿Cuidadito? (intenta tirarle la plancha
y las otras la detienen) ¡Ahí, va!
LUCAS
¡Socorro!
FELICIANO
(Interponiéndose se coloca entre María y
Paquita)
¡Calma!
SATURNA
¡Hija, por Dios! que puede usted
lastimar a mi niña!
MARIA
(Furiosa) ¿Y qué?
SATURNA
¡Que está delicada!
MARIA
¡Granuja!
FELICIANO
¡Tranquilidad!
CARMENCITA
¡Tírele usted esta otra, que está
caliente!
FELICIANO
(Conteniéndola) ¡Poco a poco!
LUCAS
(Esta niña calienta las planchas pa
escalabrarnos)
FELICIANO
¡Dios no permite que riñan sus siervos:
todos somos iguales ante El, y como a tales, debemos respetarnos y querernos,
amando y respetando de este modo a Dios nuestra Señor! ¡Cuán rebeldes somos!
¡De cuántos pecados habremos de arrepentimos el día que el Altísimo nos llame a
su seno! ¡Oh, mundo, mundo! ¿Fili liominum usquequo gravi corde?
LUCAS
(Ya está aquí el Obispo de Madrid-Alcalá)
FELICIANO
Reine la paz entre los siervos del
Señor, y usted, Mariquita, tranquilícese y no le haga caso. ¡Ya sabe usted que
siempre está de broma!
MARIA
¿De broma, eh? ¡Pues que se las gaste a su
abuela!
LUCAS
¡Si se murió hace treinta años!
MARIA
¡Guasón!
FELICIANO
No vuelvan ustedes a las andadas y
déjenme tranquilo continuar mi lectura.
LUCAS
¿Y qué lee usté? ¿El Siglo futuro?
FELICIANO
(Pasando al lado de Lucas) El único periódico
que puede leer, un joven de sentimientos piadosos, como yo.
LUCAS
(Santiguándose) ¡Amén Jesús! Un hombre
así le convenía a usted, Mariquita!
PAQUITA
(Muy contenta y muy rápido) ¡Y a mí
también!
SATURNA
¡Niña!
PAQUITA
Que a mí también me... me gusta leer El Siglo
Futuro.
FELICIANO
Estaba leyendo unas efemérides.
MARIA
¿Efequé?
PAQUITA
¡Ay! ¿sí? ¡Léalas usté!
FELICIANO
El caso es... que...
MARIA
Vamos, hombre, no se haga usté de rogar.
FELICIANO
(Abriendo el periódico) «Las ligas de
Consuelo.» (Cierra el periódico rápidamente y al cerrarlo se le cae de dentro
un número del periódico «La Pulga.»)
LUCAS
¡Já, já, já!
SATURNA
¡Hijo, tape usted eso, que la niña está
delicada!
MARIA
¿Y eso son efemérides?
FELICIANO
¡Estaba distraído!
LUCAS
(Que habrá cogido el periódico del suelo)
La Pulga. (Aparte a Feliciano) (¡Joven piadoso; que se le ha caído a usté un
insecto!)
FELICIANO
(¡Guárdelo usted que no lo vea nadie!)
(Lucas lo guarda)
MARIA
¿Pero lee usté ó no?
FELICIANO
(Leyendo) «Muere en el castillo de
Woaldeskrick, la famosa bailarina española, Pepita Mochuelo. La Mochuelo fue
célebre, tanto por su arte como por sus virtudes, logrando por esto casarse con
un Par de la Cámara inglesa.»
SATURNA
¿Con un par?
PAQUITA
(¡Qué suerte!)
MARIA
¡Pues no veo la virtud!
LUCAS
Ya sé yo quien se contentaría con medio
par.
FELICIANO
Par, es una dignidad. «La Mochuelo,
enviudó a poco tiempo, contrayendo segundo matrimonio con otro lord de la
Cámara de los Comunes; muriendo en el referido castillo asfixiada.»
LUCAS
¡Me alegro, por cochina!
MARIA
Vamos, niña, a recoger y a Casa. (Carmen
recoge todo, y entre ella y María lo meten en la primera derecha) Acabaré de
planchar ahí dentro.
LUCAS
¿Y quién la manda a usté planchar en el patio?
MARIA
Pues... plancho aquí, porque me da la
gana, ¿sabe usté? por la misma razón que estas señoras vienen a sacudir el
polvo a la ropa. ¿No es verdad, Paquita?
LUCAS
(Remedando a Saturna) ¡No se meta usté con
la niña, que está delicada!
SATURNA
¡Gracioso!
LUCAS
¿Pero cómo va usté a convencer a nadie
de que su niña está delicada, teniendo esas carnazas?
PAQUITA
¡Pero es carne fofa!
SATURNA
¡Padece de hidrofobia!
PAQUITA
¡Hidropesía, mamá!
LUCAS
¿Y eso, qué es?
SATURNA
¡Que se vuelve la sangre agua!
LUCAS
¡Ahí tié usté, no me había yo fijao:
creí que era una persona, y es un botijo!
SATURNA
¡Insolente! ¡Grosero!
PAQUITA
¡Déjale, mamá!
FELICIANO
¿Ya empezamos? Si prosiguen ustedes, me retiraré
a mi cuarto.
SILVIO
¡Maestro, las doce!
LUCAS
Recoger y hasta el jueves. (Los
oficiales recogen y meten todo en la primera izquierda, saliendo luego y
haciendo mutis por el foro) ¿Y cuándo canta usté misa, pollo?
FELICIANO
¡Pronto!
MARIA
¡Qué lástima!
PAQUITA
(Muy rápido) ¿De qué?
MARIA
¡De que no la hubiera cantado ya! ¿Qué
se cree usté, que lo digo con segunda intención? No, hija, no: no me gustan los
hombres tan sosos.
PAQUITA
(¡Sí, soso: no tiene nada de soso!)
FELICIANO
¡Si no fuera por mi vocación, ya vería
usted si yo era soso... pero hija mía, el sagrado ministerio que estoy
encaminado a ejercer, me lo impide. Tiene usted razón: no tengo sal! Vaya: voy
a mi habitación a continuar mis oraciones, (A Lucas) (¡Deme usted eso!) (A
todos) ¡La paz de Dios acompañe a ustedes!
LUCAS
(Dándole «La Pulga.») (¡Ahí va! Camino
recto y seguro para llegar al Cielo) (Mutis Feliciano)
SATURNA
¡Hasta luego, Vecina! (Mutis con
Paquita, segunda derecha)
MARIA
¡Abur!
LUCAS
¡A los demás, que los parta un rayo!
ESCENA II
María y Lucas.
LUCAS
¡Vecina!
MARIA
(Con mal modo) ¿Qué hay?
LUCAS
¡No tenga usté mal genio! ¿Quié usté
hacerme el favor de escuchar cuatro palabras?
MARIA
¡Si no son más que cuatro!...
LUCAS
¡Cuatro... y los réditos!...
MARIA
¡Será cosa de sentarse!
LUCAS
¡Como usté quiera! ¡Vamos a ver...! ¿Por
qué me tiene usté tanta rabia?
MARIA
¿Yo a usté? ¡Qué gracioso! ¿Pero usté se
cree, que yo me ocupo de usté ni siquiá pa eso? ¡Cá, hijo, cá! ¡Está usté equivocao!
LUCAS
¡Mentira! ¡A usté le gusto yo!
MARIA
(Tomándole el pelo) ¿Está usté seguro?
LUCAS
¡Seguro!
MARIA
¡Pero hombre! Aun suponiendo que me
gustara usté, que no me gusta, ¿se cree usté que yo iba a hacer caso a un
hombre casao? ¡Quiá, hombre, quiá!
LUCAS
Toma, toma... pues mire usté, que sería
una cosa... que... ¿Y después de tó, qué?
MARIA
Que el día que yo tenga la dibilidad de
querer a un hombre, será pa mí sola, ¿entiende usté? ¡pa mí sola, y ná más!
LUCAS
Pues yo no la puedo ofrecer a usté, más que
el cincuenta por ciento. ¡Ay, Mariquita!
MARIA
Vamos, déjeme usté en paz, que pué
llegar a oídos de su mujer y...
LUCAS
¡Lagarto! ¡Lagarto! No me la nombre
usté, que ella tiene la culpa de mi desgracia; ella, que tengo muchas ganas que
en paz descanse.
MARIA
¡Lo que tiene usté es un miedo que no ve!
LUCAS
¿Yo? ¿Miedo yo? ¿Miedo yo? Que venga,
y...
VOZ
(Dentro) ¡Lucas!
LUCAS
(Asustado) ¡Voy! ¡Hasta luego, vecina!
(Mutis primera izquierda)
MARIA
¡Pobre hombre! (Mutis primera derecha)
ESCENA III
Feliciano segunda izquierda; luego Paquita
segunda derecha.
FELICIANO
¡Gracias a Dios que se fueron! Esta es
la hora en que puedo ver a solas a mi Paquilla. Decididamente he de hablar a mi
madre y convencerla de que no me tira la Iglesia. Me es imposible seguir
fingiendo por más tiempo. Sé que mi tío me deshereda, pero no quiero torcer mi
voluntad. ¡Voy a llamar a la chica!
(Música)
FELICIANO
¡Paquilla! ¡No me oye!
¡Si Dios quisiera!
¡Paquilla!
PAQUITA
(Dentro) ¡Feliciano!
FELICIANO
¡Ven aquí afuera!
PAQUITA
Ya estoy aquí. (Saliendo)
FELICIANO
Pon atención,
que voy a hablarte
con el corazón.
(La coge de la mano y se la lleva al
proscenio, con gravedad cómica. Con música de la ópera «La Dolores.»)
«Un año dentro del alma
llevo tu imagen divina...
PAQUITA
Igual que a la Dolores
decía le el curita.
FELICIANO
Igual que aquél sentía,
por ti mi pecho siente.
PAQUITA
Ninguno pensaría
que fueras tan vehemente.
FELICIANO
¿Y por qué no?
PAQUITA
¡Qué me sé yo!
FELICIANO
Yo te quiero,
yo te adoro,
mi lucero,
mi tesoro.
Yo venero
tu hermosura,
vida y dulzura.
Por ti deliro
y a ti suspiro.
Vuelve a mí tus ojos
misericordiosos
y bendito sea el fruto...
PAQUITA
No seas bruto,
que adelantas demasiado
y decir eso es pecado.
FELICIANO
Es que pensaba
que ante la Virgen,
la salve rezaba.
PAQUITA
Si mi madre se enterase
yo no sé lo qué diría.
FELICIANO
Al saber lo que te quiero
creo que se alegraría.
Cuando juntitos del brazo
vayamos los dos,
luciendo tú la gracia
que te ha dado Dios,
dirán los que creían
en mi vocación:
¡Valiente padre cura
que ha salió el gachó!
Y si el cielo, piadoso,
al cabo nos da
un hijo, que yo creo
lo más natural,
dirán mis compañeros
al verme pasar:
Si no es un padre de almas,
es un buen papá.
PAQUITA
¡Ay, por Dios, Feliciano,
no seas atroz,
porque estoy sofocada
y tengo un calor!...
FELICIANO
Ay, Paquilla del alma,
no me hagas sufrir,
que sin ti, Paquilla mía,
no podré vivir.
PAQUITA
Para ti solamente
mi cariño será.
FELICIANO
Que pronto nos unamos
en lazo conyugal.
(Hablado)
PAQUITA
Pero, Feliciano,
¿lo dices en serio?
¿Me quieres de veras?
¿Es broma ó es cierto?
FELICIANO
El día que aprecies
lo que yo te quiero,
a ti misma te causará espanto
que quepa en mi pecho
tanto afán, tanto amor, tantas ansias,
tanto sentimiento.
No es que me alucinen
tu cara y tu cuerpo:
no es que yo pretenda
gozar de tus besos:
los goces del mundo
son goces ligeros.
Igual que si fueras
la virgen del cielo;
con la misma infinita ternura
que a ella, te venero.
Palomita blanca
que en el verde almendro
vas picando las amargas flores
que son tu alimento,
bájate del árbol,
pósate en mi pecho,
y verás la amargura tan grande
que tengo aquí dentro.
(Pausa)
PAQUITA
¿Sabes que me gusta
lo que estás diciendo?
FELICIANO
Es que mis palabras
son mis sentimientos.
PAQUITA
Pues hijo, he notado
al decirme esto,
que después de estudiar tantos años
has perdido el tiempo.
Ya tenía ganas,
ya ansiaba el momento
en que me pintases
tu cariño inmenso,
porque yo, Feliciano del alma,
yo también te quiero.
Mas tengo una pena:
un disgusto tengo;
si después de casados, un día
fuera tu desprecio,
y que tú te olvidases de tanto
como yo te quiero,
y otros brazos y otras alegrías
fueran mi tormento.
FELICIANO
Los goces del mundo
son goces ligeros.
(Le coge la mano que ella trata de
retirar)
No quites la mano.
PAQUITA
Vaya, estate quieto.
FELICIANO
(Besándole la mano)
No es que yo pretenda
gozar de tus besos. (Vuelve a besar)
PAQUITA
Pues lo disimulas.
FELICIANO
Los goces terrenos... (Vuelve a besar)
PAQUITA
¡Por Dios! (Queriendo retirar la mano)
FELICIANO
¡No seas tonta!
¡Si yo no pretendo
besarte la mano! (Besa)
PAQUITA
Vaya, no seas terco;
que me llevas dado
catorce lo menos.
(Se retira hasta la segunda derecha)
FELICIANO
¿Te enfadas? ¿No quieres?
PAQUITA
No señor, no quiero.
No permito que me hagas caricias
Sin que nos casemos. (Rápido al final)
¡Me voy!
FELICIANO
¡No te marches!
PAQUITA
Me esperan adentro.
FELICIANO
¿Te vas enfadada
por lo de los besos?
PAQUITA
¿Quieres que te diga
por qué me enfurezco?
(Con el alma)
¡Porque en vez de cuatro
no me has dado ciento!
FELICIANO
¡Serrana!
PAQUITA
Granuja. (Mutis segunda derecha)
FELICIANO
¡Olé por tu cuerpo!
ESCENA IV
Feliciano, y luego Lucas primera
izquierda.
FELICIANO
Nada, decididamente ahorco los hábitos,
es decir, la carrera, y me caso con ella a trueque de tener un disgusto con mi
madre.
LUCAS
(Saliendo) ¡Hola, pollo! ¿Está usté ahí?
(Con sorna)
FELICIANO
¡Pues... no sé decir a usted!
LUCAS
¡Ya habrá usté comprendió, que he sido
un vivo!
FELICIANO
¿Cuándo?
LUCAS
Cuando aquello de ¡La pulga! Se le cayó
a usté y yo, zas, le puse el pie encimaba que nadie se enterara.
FELICIANO
¡Ah, sí!
LUCAS
¡Vaya un socio que está usté hecho,
amigo!
FELICIANO
¿Yo?
LUCAS
¡Vaya un caña!
FELICIANO
¿Un caña? ¡No entiendo eso de caña!
LUCAS
¿Pero, un hombre qué lee La pulga y no sabe
lo que es un caña?
FELICIANO
¡Vamos, pues no lo sé!
LUCAS
¡Con franqueza! ¿Qué mujer le gusta a
usté más, de toa la vecindad?
FELICIANO
¿Para... qué?
LUCAS
¡Toma... toma... para casarse! (¡Miá
éste!)
FELICIANO
¡Para casarme... no me gusta ninguna!
LUCAS
Vamos, hombre... parece mentira...
¿Conque no?
FELICIANO
¡No, señor! ¡me gustan más las mujeres
casadas! (Con mucha naturalidad)
LUCAS
¡Ay qué gracioso! ¡Vaya un punto! ¿Y
usté es el que parece tonto?
FELICIANO
¿Tonto yo? ¡Los tontos son ustedes, que
me tienen por tal! Me hago el tonto, porque me conviene.
LUCAS
¡Choque usté ahí! ¿Quiere usté venir
esta tarde conmigo al baile del Frontón Central?
FELICIANO
¡Hombre!
LUCAS
¡Aprovechamos la ocasión de ser Domingo de
Carnaval; nos ponemos un capuchón y al baile!
FELICIANO
¿Y si mi madre se entera?
LUCAS
¡Cuando se entere, ya está usté en el
baile!
FELICIANO
¡Perfectamente! ¿Y qué cuesta la entrada?
LUCAS
¡A usté seis pesetas!
FELICIANO
¿Y a usted?
LUCAS
¿A mí? nada; ¡porque usté paga la mía!
FELICIANO
¡Bueno; yo la pago, pero usted me presta
las seis pesetas!
LUCAS
¡Sí, sí! (¡Como no bailes con la
escoba!)
FELICIANO
¡Pues luego nos veremos y me trae usted eso!
LUCAS
¡Sí, sí, ya nos veremos! (En Agosto)
Hasta luego! (Mutis primera izquierda)
ESCENA V
Feliciano y María primera derecha.
FELICIANO
¡Este se había creído que yo era un
lila!
MARIA
(Saliendo) ¡Hola, Feliciano! ¿Ha visto
usté por casualidad el agarrador de la plancha? ¡Me lo debo de haber dejao por
aquí!
FELICIANO
¡Pues no le he visto!
MARIA
¡Quizá lo habrá escondió el señor Lucas
pa darme alguna broma! ¡ Y el caso es, que río tengo más que ese y no puedo
seguir planchando!
FELICIANO
¿Pero aún continúa usted planchando? ¿No
sabe usted que la Santa Madre Iglesia prohíbe que se trabaje los domingos y
fiestas de guardar? Además, hoy es Carnaval y es justo que la gente se
divierta, dentro de lo que permite la honestidad!
MARIA
¿Y en qué quiere usté que me divierta yo
hoy? ¡Cómo no fuera a ver las máscaras ó al baile! Vamos a ver; ¿qué me
aconseja usté?
FELICIANO
Hija, si el baile es cosa que no ataca a
la moral... bien puede... en fin; ¡no sé, no se decir a usted!
MARIA
¿Pero usté no ha visto nunca un baile?
FELICIANO
(Santiguándose) ¡El Santísimo Nombre de
Jesús! ¿Yo, un baile? ¡Un hombre que va a cantar misa!
MARIA
¡Ay, es verdad; no me acordaba que era
usté el Curita, como le llaman en la vecindad!
FELICIANO
¡Lo seré, lo seré si el cielo me ayuda!
MARIA
Pues yo, la. verdad, no opino como usté.
Yo soy tan católica como pueda serlo la primera, pero no hubiera sido monja por
nada del mundo. [Qué pena! ¡ Verse privada de la libertad, del amor, de las
delicias del mundo! Verse privada de que se le acerque a usté un hombre y le
diga: «¡Bendito sea su cuerpecito gitano!»
FELICIANO
(Muy natural) Es que si a mí me dice un
hombre, que bendito sea mi cuerpecito gitano, le doy una bofetada; créalo
usted, Mariquita!
MARIA
No, hombre, no: si yo me refiero a las
mujeres!
FELICIANO
¡Ah!
MARIA
Vamos a ver, ¿no le ha echado usté nunca
un requiebro a una mujer?
FELICIANO
¿Yo? ¡Me daría mucha vergüenza! Además, creo
que no sabía!
MARIA
(Mirándole con coquetería) ¿Que no?
Vamos: ¡a que sí!
FELICIANO
¡Vaya, no me mire usted así, que me voy
a poner malo!
MARIA
¡Vamos a ver! Figúrese usté que está
usté parado en la calle y que paso yo por delante de usté , pisando fuerte y
mirando con gracia... ¡Póngase usté ahí! (María coloca a su lado a Feliciano.
Sube al foro y pasa por delante de él mirándole con gracia) ¡ Así! ¡mire usté!
(Viendo que no le dice nada) (¡Ay, qué hombre!) ¡Vamos, dígame, usté algo!
FELICIANO
(¡Como salga Paquilla estoy perdido!)
Cuando vuelva usted a pasar.
MARIA
(Vuelve a pasar, y al pasar le dice:) ¡Ahora!
FELICIANO
(Como si fuera un requiebro, y con mueva
naturalidad) ¡Bendito sea... el Santísimo Sacramento del altar!
MARIA
¡Ay, hijo de mi alma; es usté de lo que
no hay!
FELICIANO
¿Y qué quiere usté que yo le haga, si
soy así?
(Música)
MARIA
Alegrarse, reírse,
tener animación.
¡Parece usté un cartujo!
FELICIANO
Parezco lo que soy.
MARIA
¡Parece mentira
que tenga esa calma,
al ver este cuerpo
y al ver esta gracia!
FELICIANO
Si yo no sé esas cosas,
¡qué duda cabe!
Se debe enseñar siempre
al que no sabe.
MARIA
Tiene usté gracia.
FELICIANO
¿Y qué he de hacer?
¿Tengo yo la culpa
de no saber?
MARIA
Es la verdad,
tiene razón,
pues a ver si se aprende usté pronto
esta lección.
Cuando pasa una moza barbiana
por esas calles...
¡Olé!
Se bendice su cara gitana
y sus andares.
¡Chipé!
Se le tira el sombrero y se dice:
«Píselo usté
y levante usté un poco esa enagua,
porque ya adivino
lo que no se ve.»
¡Olé!
(Se da unos paseítos con gracia)
FELICIANO
¡Kyrie eleison!
MARIA
¡Guasón!
FELICIANO
¡Christe eleison!
MARIA
¡Sombrón!
(Los
dos a la vez)
FELICIANO
Santa Dei Genitris.
Santa María.
Mater amabilis.
Turris Davidica.
MARIA
Con esta gracia
que Dios me dio
y este salero
que tengo yo,
no hay en el mundo
quien no me diga:
«¡Viva la madre
que te parió»
MARIA
Deje usté los salmos
y las letanías.
Deje usté esas cosas,
que son tonterías,
y aprenda usté
sin dilación
la posición que hay que adoptar
pa bailar una habanera,
ó una polka zalamera
ó unos valses de salón.
FELICIANO
No he de aprender
eso a bailar.
MARIA
¿Por qué?
FELICIANO
Porque el chotis
me gusta mucho más.
(Hacen todo lo que indique la letra)
MARIA
Se coloca la, mano en la cintura
con mucha suavidad.
FELICIANO
¿Así?
MARIA
¡Bien va!
FELICIANO
(Con voz muy chula)
Pa tener la pareja bien segura
un poco hay que apretar.
MARIA
Sin abusar.
Las cabezas Fe ponen muy unidas,
sin exageración.
FELICIANO
Y al bailar, si la socia se descuida,
se lleva un achuchón.
MARIA
¡Y un bofetón! (Se lo da)
FELICIANO
(Separándose)
Yo pensaba
que cuando se bailaba
había eso que hacer
con la mujer.
MARIA
Hay que ser con las hembras decidido,
mas no tan atrevido.
FELICIANO
¡Así lo haré! (Agarrándose)
¡No dirá que en el baile no soy diestro,
pues casi soy maestro
y acabo de empezar!
MARIA
Ya he notado
que sabe usté apretar
y también aprovechar
cuando llega algún descuido.
FELICIANO
Pues amiga,
le puedo a usted jurar
que al hacerlo,
pues ha sido
sin quererlo remediar.
MARIA
¡Las ganitas que tenía
que estuviéramos así!
FELICIANO
Pues lo mismo hace unos días
me está sucediendo a mí.
(Como salga la Paquilla
se arma la revolución)
MARIA
Ya es usté todo un maestro
en el chotis ele salón.
(Hablado)
(Muy natural y muy chulo toda la escena)
MARIA
¡Es usté mas granuja de lo que yo me
creía!
FELICIANO
¡Pues no sé cómo pueda ser eso!
MARIA
¡Vaya un tío más chulo!
FELICIANO
¡Ahora quiero pagar a usted la lección!
MARIA
¿En plata... ú en oro?
FELICIANO
¡En sangre de mis venas! Ponga usted la mano;
no, así no; la palma; para abajo, (Se arrodilla) ¡Espere usted!
MARIA
Pero, ¿qué va usté a hacer?
FELICIANO
¡Que es usted la reina de mi alma, y a
las reinas hay que darles las cosas de rodillas!
MARIA
¡Pero, hombre!... (Feliciano la coge la
mano y se la besa repetidas veces)
ESCENA VI
Dichos y Lucas, primera izquierda.
LUCAS
(Sorprendido; desde la puerta) (Agua¿ aguardiente,
azucarillos! ¡Aguaaa...!)
MARIA
¡Vamos, hombre... arriba! ¡Suélteme
usté?
FELICIANO
¡Si esto para mí no tiene importancia. (Sigue
besando)
MARIA
¡Basta, hombre, basta! ¡Arriba, arriba!
LUCAS
(¡Arriba, caballo moro!)
FELICIANO
(Levantándose) ¿Arriba?
MARIA
¡Sí, hombre!
FELICIANO
(Acercándose a la cara) ¿Aquí?
MARIA
¡Poco a poco! (¡Camará con el tío; él ha
sío tardío; pero cierto)
LUCAS
(¡Vaya un curita!)
FELICIANO
¡Ay, madre de mis ojos!
MARIA
¡Pero si usté no me quiere!
FELICIANO
¿Qué no? ¿Quiere usted venirse esta
tarde conmigo al baile del Frontón Central?
MARIA
¡Pues si no estaba deseando otra cosa! Pero
disfrazados, ¿eh?
FELICIANO
Es natural. Precisamente tenemos en la
casa todo lo necesario. ¡Mire usted allí! (Señalando a la puerta donde están
colgados los dominós) ¡Elija usted!
MARIA
¡El rosa!
FELICIANO
¡Y el verde para mí!
LUCAS
(¡Yo sí que te voy a poner verde! No lo verán
tus ojos. ¡Te vas a llevar el gran mico!) (Sube la escalera que conduce al
corredor y hace mutis por la puerta donde están colgados los dominós)
ESCENA VII
Dichos, menos Lucas.
FELICIANO
Y después del baile, a Fornos a comer, y
luego otra vez al baile, y luego...
MARIA
¡Ay! ;ay! ¡ay! Pues no quiere usté ir
poco lejos. ¡Es usté muy atrevido!
FELICIANO
¡Si me ha vuelto usted loco, Mariquita!
MARIA
¿Pero y la vocación? ¿Va usté a cortar
su carrera?
FELICIANO
¡Por usted soy yo capaz de cortarle la
cabeza a cualquiera!
MARIA
¡Qué atrocidad! ¡Pues no le ha entrado a
usté poco fuerte que digamos!
FELICIANO
¡Con una fuerza de veinticinco mil
caballos! (Sale por la puerta del corredor un hombre que descuelga los dóminos
y los mete dentro por la misma puerta) ¿Conque quedamos en eso? ¡A las tres, en
la puerta de su cuarto!
MARIA
¡En punto! Vaya, me voy; no sea que
venga alguien y nos vea, que luego ya sabe usté que todo son murmuraciones
(Medio mutis)
FELICIANO
Pero, ¿se va usted sin buscar el
agarrador?
MARIA
¡No, si el agarrador no se me había
perdido! ¡Era... un pretexto! (Mutis primera derecha)
FELICIANO
¡Gitana! ¡Cuerpo bonito! ¡Madre de mi
alma! ¡Sangre de mis venas! Oiga usted... ¡María!... ¡María!...
ESCENA VIII
Dicho y Paquita segunda izquierda.
PAQUITA
(Llorando) ¡Ay, Feliciano de mi vida!
FELICIANO
Santa María... madre... (Transición)
PAQUITA
¡Ay, Feliciano!
FELICIANO
¿Qué tienes? ¿Por qué lloras?
PAQUITA
¡Porque acabo de tener un disgusto muy grande
con mi madre!
FELICIANO
¿Por qué?
PAQUITA
Porque con objeto de ir preparándola para
que consienta nuestro matrimonio la dije: «Mamá, yo tengo muchas ganas de
casarme.» Y me contestó que no quería, porque dice que estoy muy enferma. Ya
ves tú, ¡como si eso fuera un inconveniente!
FELICIANO
Ninguno: tú te casarás y te pondrás
buena en seguida.
ESCENA IX
Dichos y Lucas por la puerta del
corredor. Saca en una mano el dominó verde, y al ver a Feliciano se pone la
mano en la espalda, ocultando el dominó.
PAQUITA
¿De veras?
LUCAS
(¿Todavía están aquí éstos?)
FELICIANO
¡Ya lo creo!
LUCAS
(¡Demonio, si es la delicada!)
PAQUITA
¿Me lo juras?
LUCAS
Bajando con precaución) (¡Si pudiera
escurrirme sin que me vieran!)
FELICIANO
(Besándole la mano) ¡Te lo juro!
LUCAS
(¡A... ceite! ¡Este carita no va a dejar
en paz a ninguna Vecina!) (Continúa bajando)
PAQUITA
¡Júramelo otra vez!
LUCAS
(¡Se conoce que le ha gustao!)
FELICIANO
¡Otra vez... y mil! (Besa)
LUCAS
(Que estará ya en el último escalón)
(¿Mil? A las treinta y siete estoy yo en la Puerta del Sol) ¡Ay! (Tropieza y
hace ruido)
PAQUITA y FELICIANO
¡Ay! (Se retiran asustados pero sin
hacer mutis. Feliciano a la izquierda. Paquita a la derecha, quedando Lucas en
el centro de la escena)
LUCAS
(Turbado y con el dominó escondido)
(¡Metí la pata!)
PAQUITA
(¿Nos habrá visto?)
FELICIANO
(¿Se habrá enterado?)
PAQUITA
(¡Valor!) Yo le suplí...
LUCAS
(Sin dejar terminar la frase, sujeta el
dominó con la mano izquierda y saluda muy afectuosamente con la mano derecha)
¡Señorita!
FELICIANO
(¡Serenidad!) Yo siento un...
LUCAS
(El mismo juego con la izquierda»)
¡Caballero!
PAQUITA
Usted compren...
LUCAS
(Idem con la derecha) ¡Señorita!
FELICIANO
Ha sido que yo... la...
LUCAS
(Idem) ¡Caballero!
PAQUITA
¡... ! (Al intentar hablar la,
interrumpe Lucas con su saludo)
LUCAS
¡Señorita!
FELICIANO
¡... ! (Idem)
LUCAS
¡Ca... ! (Idem)
PAQUITA
¡... ! (Idem)
LUCAS
¡... ! (Idem el juego hasta que Lucas
hace mutis por el foro, haciendo saludos sin volver la espalda al público, para
que no se vea el dominó)
ESCENA X
Paquita y Feliciano.
PAQUITA
¡Nos ha visto! (Muy rápido)
FELICIANO
¿Y qué?
PAQUITA
¡Que se lo dirá todo a mi mamá y
tendremos otro disgusto!
FELICIANO
¡De todas maneras lo tiene que saber!
PAQUITA
¡Y no me dejará casar contigo!
FELICIANO
Se me ocurre una idea.
PAQUITA
¿Cuál?
FELICIANO
¿Tú me quieres?
PAQUITA
¡Si no te quisiera, no lloraría tanto!
FELICIANO
Entonces, ¿estarás decidida a todo?
PAQUITA
¡A todo lo que pueda!
FELICIANO
¡Vente conmigo al baile del Frontón!
PAQUITA
¡De ninguna manera!
FELICIANO
Pues ese es el único medio de que tu
madre acceda a que te cases.
PAQUITA
¡No, no; eso no!
FELICIANO
Pues ya lo sabes: si me quieres, te
pones un capuchón, y dentro de un cuarto de hora me esperas en este sitio.
PAQUITA
¡No, pues sola no voy!
FELICIANO
¡Pues si no vienes, no te vuelvas a
acordar de mí! ¡Si me quieres, dentro de un cuarto de hora aquí!
PAQUITA
Pero si...
FELICIANO
De lo contrario, hemos concluido. (Mutis
segunda izquierda)...
ESCENA XI
Paquita y luego María, primera derecha.
PAQUITA
¿Y qué hago yo? ¡Si la vecina quisiera
acompañarme!... ¡Yo me atrevo! ¡María! ¡Mariquita!
MARIA
(Dentro) ¿Quién me llama?
PAQUITA
¿Quiere usted hacer el favor?
MARIA
Pase usted.
PAQUITA
No señora, haga usted el favor de salir.
MARIA
¡En seguida! (saliendo) Vaya, ¿en qué
puedo servir a usté?
PAQUITA
¡Ay, vecina de mi alma! Usted que es tan
buena podría complacerme.
MARIA
Si está en mi mano, con mucho gusto.
¿Qué le pasa a usté?
PAQUITA
¡Pues yo... tengo novio!
MARIA
¡Yo también lo tengo!
PAQUITA
¡Y quiere llevarme esta tarde al baile!
MARIA
¡Y el mío también!
PAQUITA
¿Sí?
MARIA
¡Sí, hija, sí! (¡Esta niña es tonta!)
PAQUITA
Pues ahí está mi petición. Yo quisiera
que usted me acompañara.
MARIA
Pero con una condición. Que su novio no
se acerque a nosotras, porque el mío es muy celoso.
PAQUITA
No hay inconveniente: le llamo y se lo
digo. Precisamente, vive en la vecindad.
MARIA
¡Hola, y qué calladito lo teníamos! ¿Y
quién es? ¡Digo, si no es una inconveniencia!
PAQUITA
Ya que ha sido usted tan buena, se lo
voy a decir; ¡pero no me comprometa usted! ¡Feliciano!
MARIA
¿Cómo?
PAQUITA
¡El seminarista!
MARIA
¿El seminarista?...
PAQUITA
¡Qué ahorca la carrera por casarse
conmigo!
MARIA
¿Con usté? ¡So embustera!
PAQUITA
¿Qué dice?
MARIA
¡Te voy a dejar la cabeza como la palma
de la mano! (Se agarra con ella)
PAQUITA
(Huyendo) ¡Ay, Dios mío! ¡Socorro!
¡Mamá!
ESCENA XII
Dichas y Saturna segunda derecha.
SATURNA
¿Qué es eso? ¿Qué pasa?
PAQUITA
(Escondiéndose detrás de Saturna) ¡Esta
mujer, que se ha vuelto loca!
MARIA
¡Su hija de usté, que es una cualquier
cosa!
SATURNA
¡Oiga usted, so insolente!
MARIA
¡Que quiere marcharse al baile con mi novio!
PAQUITA
¡No lo creas, mamá, no lo creas!
SATURNA
¡Grosera, más que grosera! ¡Vámonos,
niña!
MARIA
¡Ansiosas!
SATURNA
¡Irá usted al juzgado! (Acercándose a la
puerta, segunda derecha)
PAQUITA
¡Vámonos, mamá!
MARIA
¡Al infierno!
PAQUITA
¡Vámonos!
SATURNA
¡Rabanera!
(Paquita y Saturna se van rápidamente
segunda derecha, cerrando la puerta)
MARIA
¡So...! ¡Ay! ¡Hombres... hombres! ¡Todos
son lo mismo! ¡En cuanto pesque a ese tío ¡am! me lo como! ( Mutis, primera
derecha, con furia, cerrando la puerta)
ESCENA XIII
Feliciano por la segunda izquierda.
FELICIANO
¡Qué silencio! ¿Habrá subido Paca a
alquilar el dominó? ¿Habrá subido María? ¿Cuál de las dos será la que me toque
en suerte? Lo mismo me da Juan que Pedro: la primera que caiga. Voy por mi
capuchón. (Subiendo la escalera) ¡Calle! ¡No están aquí los dominós! (Hace
mutis por la puerta del corredor)
ESCENA XIV
Lucas, sale por el foro. Saca puesto el
capuchón verde, careta negra y guantes. Se tambalea, sin caerse, y no habla
hasta que llega al proscenio.
LUCAS
No me conoce ni mi familia. Me he tomao tres...
tres docenas, y me he puesto al reló. Esta tarde, ú me da el sí la planchadora,
ú no vuelve a planchar más en tó lo que le queda de vida. ¡No hay nadie! ¿Se
habrá puesto ya el capuchón la señá Mariquita? ¡Quizá se lo esté poniendo! Si
yo pudiera ver... (Se pone a mirar por la rendija de la primera derecha)
ESCENA XV
Dicho y Feliciano, el último con el
capuchón de color rosa, careta negra y guantes.
FELICIANO
(No me ha querido decir a quién le ha
alquilado el dominó verde; pero de seguro habrá sido a María, que ha confundido
los colores. ¡Calle! ¡Si está en la puerta de su cuarto aguardándome!) (Baja la
escalera y queda en primero izquierda)
LUCAS
(¡Todo lo veo negro! ¡Estaba por
llamar!)
FELICIANO
(Sí. ¡Ella es!) ¡Chist! ¡Chist!
(Llamando desde la izquierda)
LUCAS
(¿Quién me manda callar? ¡Demonio, si
está allí!) (Lucas hace señas a Feliciano para que vaya donde está él. Ambos
echan a andar al mismo tiempo, llegando frente a la concha. Lucas ofrece el
brazo derecho a Feliciano, y éste el izquierdo a Lucas. Por fin se cuelga
Feliciano del brazo de Lucas, y antes de echar a andar se miran escamados; dan
tres pasos iguales hacia el foro, se paran y se vuelven a mirar, y así
sucesivamente hasta que desaparecen por la puerta del foro)
ESCENA XVI
María primera derecha, Paquita y Saturna
segunda derecha.
MARIA
(Entreabriéndola puerta de su cuarto,
sin salir a escena) (¡Me las pagarán!)
SATURNA
(Idem en la segunda derecha) (¡Ah,
pillo!)
PAQUITA
(¡Míralos, mamá!)
SATURNA
(¡Nos vengaremos!) (Cierran y se meten
dentro)
MUTACION
CUADRO SEGUNDO
Calle corta, que representa una de las
próximas a la Puerta del Sol.
ESCENA XVII
Salen por distintos sitios máscaras y
particulares, que tiran confetti y serpentinas. Cuadro muy animado, a gusto del
director. Luego la estudiantina, primera derecha.
(Música)
CORO GENERAL
No hay nada más alegre
que el Carnaval:
no hay fiesta más hermosa,
no hay nada igual.
Alegres serpentinas
de mil colores
enredan muchas veces
los corazones.
Que viva la alegría
y el buen humor;
el Carnaval es fiesta
para el amor.
(Sale por la derecha la Estudiantina con
bandera y comparsas con guitarras, flautas, violines, panderetas, etc. Con
ellos salen algunos que no van de mascara, chicos, etc. Postulantes, etc.,
quedan formados frente al público)
ESTUDIANTINA
Nosotros componemos
la estudiantina
y en Carnaval
gastamos en confetti
y en serpentinas
un dineral.
Las calles recorremos
todos nos siguen
con atención,
y al son de las guitarras
somos de todos
admiración.
Hay muchachas que se alegran
cuando llega el Carnaval,
pues las faltas de la cara
cubren con el antifaz.
Plón, plín, plán.
Esta es la jotica
de la serpentina,
la que mejor canta
nuestra estudiantina.
Con los guitarrillos
y las panderetas,
bailando la jota
la gente se alegra.
(Tocan y el panderetólogo baila)
No hay un canto más alegre
que la jota de Aragón,
son las notas arrancadas
del fondo del corazón.
Plán, plín plón.
Esta es la jotica,
etc., etc.
(Tocan, bailan, se forman como salieron
y hacen mutis por la izquierda cantando)
Nosotros componemos,
etc., etc.
CORO
No hay nada más alegre,
etc., etc.
(Se van detrás de los estudiantes)
ESCENA XVIII
Lucas y Feliciano primera derecha.
LUCAS
(Con la careta en la mano) Que no te suelto,
que no te suelto y que no te suelto, ¡ea!; que el que se encuentra una cosa es
pa él, y yo te he encontrao a ti, y tú eres pa mí, y asunto concluido. Yo me he
quitao la careta y te he dejao ver mi rostro bello, ¡y tú tiés que hacer lo
mismo!
FELICIANO
(Con voz de máscara) Pues, no lo conseguirás.
LUCAS
¿Qué no? ¡Miá que yo soy muy bruto!
FELICIANO
(Idem ) Ya te conozco.
LUCAS
Vamos, mascarita, que me has traío
dándome la lata desde mi casa aquí, y es inútil que sigas fingiendo por más
tiempo, ¡porque te conozco!
FELICIANO
(Idem) ¿A qué no?
LUCAS
¿Que no"? ¡Quítate la careta, y te
digo quién eres!
FELICIANO
(Idem) ¡Ay qué gracioso!
LUCAS
Pero... si estoy en el secreto. Yo he
venido aquí porque he sorprendido la conversación que tenías con el curita; por
eso me adelanté yo y alquilé el dominó que él se había de poner, para que me
confundieras con él, y de ese modo te daba a ti el camelo y él se llevaba el
mico, porque yo... ;soy un tío! ¿Eh? (¡Anda, chúpate esa!)
FELICIANO
(¡ Ah, granuja!) (ídem) ¿Conque el mico,
eh?... ¿Y si te lo llevaras tú?
LUCAS
¿Yo? ¡Já, já! ¿El mico yo?
FELIACINO
(Idem) Sí; porque yo no soy esa, ¡esa
persona que tú crees!
LUCAS
(¡Demonio!) ¿Que no? A ver, anda un
poco. (Feliciano pasa al otro lado) ¡Olé! No. sigas. ¡Tú eres Mariquita!
FELICIANO
(¿Maldita sea tu estampa!) (ídem) ¿Yo?
LUCAS
¡Tú, sí! ¡Te conozco en el modo de
andar!
FELICIANO
(Idem) ;Já, já, já!
LUCAS
¡Mariquita, Mariquita, no me cabe duda!
FELICIANO
(Idem) ¡Pues te equivocas!
LUCAS
¡Pues descúbrete!
FELICIANO
(Idem) ¡En el salón me descubriré! (¡Ay,
qué paliza te voy a dar!)
LUCAS
¿Me lo juras?
FELICIANO
(Idem ) ¡Ya lo creo quo te lo juro!
LUCAS
¡Al baile! {Mutis izquierda cogidos del
brazo)
CUADRO TERCERO
Decoración a todo foro representando el
Frontón Central, acondicionado para bailes. Extraordinaria animación. Es la
caída de la tarde; por lo tanto, las luces estarán encendidas, prestando de
este modo más brillantez al cuadro. La orquesta convenientemente colocada para
el baile etc. Sobre todo mucha luz.
ESCENA XIX
Máscaras y particulares de todas clases.
Lucas y Feliciano con las caretas puestas. Saturna, María y Paquita,
disfrazadas y también con las caretas puestas. El Bastonero en el centro. Un Inspector
de uniforme (levita y gorra) al lado del bastonero ó paseándose.
(Música)
BASTONERO
Cuidado, máscaras,
vayan despacio
y no interrumpa
ninguno el paso.
(Las máscaras continúan paseando con
orden. Salen por la derecha, ocho señoras que deben ser muy guapas y bien
formadas, representando una comparsa de Blanco y negro», vestidas de la
siguiente manera: zapatos de raso blanco, media de seda negra, ligas blancas, malla
carne, trusa muy cortita y muy ceñida, de raso negro, chaleco de raso blanco
con botones negros, muy escotado; cuerpo hechura de frac, también de raso negro
y los faldones forrados del mismo género; este cuerpo, no lleva mangas. Al
cuello una cinta de terciopelo negro con un broche blanco; guantes largos, negros,
sombrero de medio queso, de raso blanco y cucharitas negras. El peinado a lo
Cleo de Merode, empolvado. Antifaz negro. Sobre el hombro un lazo de largas
caídas blancas y negras Salen cubiertas con largas capas blancas, que se quitan
a su debido tiempo)
B. y N.
Somos chicas distinguidas,
lo más tino de Madrid.
No hay ninguna que se iguale
en donaire y en Sprit.
Aunque usamos capas largas
ya se pueden figurar,
que tan sólo las llevamos
por respeto a la moral.
Somos chicas caprichosas
que venimos al Frontón,
y de fijo al descubrirnos
llamaremos la atención.
Es el traje tan ligero
como ustedes podrán ver
casi, casi, es el primero
que ha gastado la mujer.
Yo no sé si quitarme la capa,
yo no sé qué hacer;
mas siguiendo con ella tapada
no me pueden ver.
Mas teniendo la cara cubierta
con el antifaz,
no me da tanta vergüenza descubrirme
conque voy a decidirme!
Mesiés me voalá. (Se quitan las capas)
(Recitado
al público)
Diga usted, ¿le gustan todas
ó le gusto sólo yo?
¿Qué me quite la careta?
¡Al momento, sí señor!
(Se quitan el antifaz y miran al público
con coquetería)
¿Y ahora qué? ¡Ay!
(Cantado)
Si quiere usted bailar
ya puede usted subir
y no ha de vacilar
pareja en elegir,
pero ha de procurar
no dar un apretón,
no sea que al bailar
nos echen del Frontón.
CORO GENERAL y TODOS
Si quiere usted bailar
no debe presumir,
pues ha de calcular
que yo sé distinguir.
Y debe procurar
no dar un apretón
no sea que al bailar
nos echen del Frontón.
BASTONERO
(Dando unos golpes en el suelo)
¡¡Gran can-cán!!
¡Parejas!
UNOS
¡Bravo!
OTROS
¡Bien!
(Entusiasmo indescriptible, se forman
las parejas y se baila «un can-cán por todo lo alto». Los demás tiran serpentinas,
confetti, y termina el número en medio de un verdadero escándalo de vítores y
aclamaciones, a la voz del Bastonero que dice:)
¡Or... den!
(Hablado)
PAQUITA
(A María y Saturna) (¡Aquéllos deben
ser!) (Señalando a Feliciano y Lucas que están a la izquierda)
LUCAS
¡Larala, laralala!... ¡Qué lástima que
yo no sea fino pa saber bailar estas cosas!
MARIA
(A Saturna y Paquita) (¡Son ellos, no me
cabe duda! ¡Vamos a darles la carga!) (Pasa María a la izquierda al lado de
Feliciano)
LUCAS
(A Feliciano) ¡Vente al ambigú!
FELICIANO
(Con voz de máscara) ¡Te he dicho que me
dejes y no seas pesado!
LUCAS
(Quitándose la careta) ¡Pues quítate la
careta como yo!
MARIA
(Fingiendo la voz y apoyando el brazo
derecho en el hombro izquierdo de Feliciano)
¡Ay, máscara!
FELICIANO
¿Eh?
SATURNA
(Habrá cogido a Lucas; se lo lleva a la
derecha y se apoya sobre el brazo derecho) ¡Ay, máscara!
LUCAS
(Enfadado) ¿Qué hay?
PAQUITA
(Que habrá quedado en el centro de los
dos grupos) (¡Qué miedo tengo!)
SATURNA
(A Lucas fingiendo) ¡Te conozco!
MARIA
(A Feliciano) ¡Te conozco!
SATURNA
¡Tú eres zapatero!
MARIA
¡Y tú un sinvergüenza!
SATURNA
Y tú otro sinvergüenza.
LUCAS
¡Y tú una bruja!
MARIA
(Tirando un pellizco a Feliciano)
¡Pillo!
FELICIANO
(Enfadado, con voz natural) ¡Poco a
poco! ¡Hasta ahí podrán llegar las bromas! (Se quita la careta) ¡Ea, se acabó!
MARIA
(Quitándose la careta) : Mírame!
FELICIANO
(¡Dios mío!)
PAQUITA
(Idem) ¡Mírame!
FELICIANO
¡Paca!
LUCAS
¡El Curita! ¡Lo mato! (Saturna sujeta a
Lucas, y al sujetarlo le descose la esclavina del capuchón, que casi queda
colgando)
SATURNA
¡Quieto aquí!
MARIA
(Dándole golpes en el hombro a Feliciano)
¡Ladrón!
PAQUITA
(Idem) ¡Sinvergüenza!
MARIA
¡Granuja!
PAQUITA
¡Pillo!
MARIA
¡Mal hombre!
PAQUITA
¡Perjuro!
LUCAS¡
Duro, duro con él! (Al escándalo se
acerca la gente)
SATURNA
(Quitándose la careta) ¡Corruptor de
menores!
LUCAS
¡Y de mayores!
INSPECTOR
¿Qué escándalo es este?
LUCAS
(¡El capitán del Puerto!)
SATURNA
¡Prenda usted a este hombre, que ha
querido seducir a mi hija!
MARIA
¡Y a mí también!
INSPECTOR
(A Lucas) ¿Y usted?
LUCAS
¡Yo no me he metido en nada!
INSPECTOR
¡Cuidadito con volver a armar escándalos
en el baile!
FELICIANO
Yo ruego a usted que dispense. Esto no
tiene importancia, señor Inspector.
INSPECTOR
Bueno, bueno: cada uno por su lado y a callar.
FELICIANO
¿Pero cómo están ustedes aquí las dos,
quisiera yo saber?
PAQUITA
Porque al enterarnos de que nos habías
engañado, nos pusimos de acuerdo...
MARIA
Para venir al baile y convencernos de su
poca... aprensión; pero lo que es pa mí, acabó usté, hijo. ¡Es usté demasiao
enamorao!
PAQUITA
¡Darme ese disgusto sabiendo lo que yo
te quiero!
FELICIANO
¡Yo me caso contigo!
SATURNA
Mi niña no se puede casar; está muy
enferma.
LUCAS
Pues mejor: casándose con éste tendrá
cura.
MARIA
(Pasando a su lado. A Lucas) ¿Ha visto
usté qué suerte la mía?
LUCAS
¡Si hubiera usté hecho caso de mí!
MARIA
¡Ande usté y que lo zurzan!
LUCAS
¡Pues mire usté, buena falta me hace!
(Enseñando el descosido del capuchón)
TODOS
¡La estudiantina! ¡A bailar!
LUCAS
¡Viva el Carnaval! (Comienzan a bailar
los últimos compases del can-cán y
TELON RAPIDO
Información obtenida en:
https://archive.org/details/elcuritazarzuela00vive
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