La Guardabarrera (Libreto)

LA GUARDABARRERA

Zarzuela en un acto y cinco cuadros.

Original de Luis de Larra y Eugenio Gullón.

Música de Tomás López Torregrosa.

Estrenada en el Teatro Moderno de Madrid, la noche del 15 de Febrero de 1905.

REPARTO (Estreno)

Juana - Srta. Loreto Prado.

Tomasa - Srta. Franco.

La Tía Moñitos - Sra. Castellanos.

Boliche - Sr. Chicote.

Ezequiel, asentador de vía - Sr. Valcárcel.

Félix, maquinista - Sr. Llaneza.

El Tío Risita, guardabarrera - Sr. Ripoll.

Aniceto, ordinario de pueblo - Sr. Soler.

Guardia Civil 1º - Sr. Velázquez.

Guardia Civil 2º - Sr. Morales.

Obrero 1º - Sr. Borda.

Obrero 2º - Sr. Fernández.

Obrero 3º - Sr. Castro.

El Fogonero - Sr. Bermúdez.

El Interventor del tren - Sr. González.

El Juez - Sr Delgado.

El Escribano / El Alguacil / El Guardafreno / El de Sliping-Kar / El Conductor del tren /

Obrero 4º - No hablan.

Viajeras y viajeros.

La acción en las inmediaciones de Villalba.

Derecha é izquierda, las del espectador.

ACTO UNICO

CUADRO PRIMERO

Campo; en el centro una casita cuadrada, de ladrillo, con puerta practicable. Sobre la puerta una chapa marcando K. 37' 65. En la fachada de la casilla, colgados cerca de la puerta, dos banderines de señales, enfundados. Desde la última caja de topes, a la primera de arrojes, atravesando la escena, carretera cortada por una vallapuerta de hierro que juega a su tiempo; postes telegráficos desde primera de arrojes hasta el foro, indican vía próxima que no se ve. Dos árboles grandes a los lados y delante de la casa; un pozo y abrevadero próximos a la casita; un montón de traviesas viejas y ennegrecidas. Se supone que en la primera caja de arrojes, la carretera atraviesa la vía. La escena es el paso a nivel. Al levantarse el telón aparecen la tía Moñitos sentada bajo un árbol con una media azul en la mano, durmiendo y roncando exageradamente; bajo el otro árbol Tomasa sentada con un niño de pecho en brazos dándole biberón; a su lado una cunita de forma antigua y de madera pintada de verde. Boliche sacando cubos de agua del pozo

y vertiéndolos en la arqueta ó abrevadero de madera en rústico. El Tío Risita con una cazuela grande de salvado llamando a las gallinas. Juana con el banderín enfundado bajo el brazo.

ESCENA PRIMERA

Juana, Tomasa, el Tío Risita, la Tía Moñitos y Boliche.

RISITA

(Llamando a las gallinas) ¡Tá, tá, tá! ¡Pitá, pitá, pitá! ¡No vienen!

JUANA

¡Pero, padre, si se han acostao ya! Vaya una hora de dar de comer a las gallinas.

RISITA

¡No tendrán mucha hambre!

BOLICHE

¡Pa hambre la mía!

TOMASA

(Asustada, mirando al niño) El chico no chupa, ¿estará malo?

JUANA

(Acercándose con interés) ¡A ver!

BOLICHE

(Acercándose) Trae que chupe yo.

TOMASA

¡Goloso! (Dándole un cachete)

BOLICHE

¡Quién fuera chico pa tener too el día el biberón en la boca!

RISITA

Cualquiera que te oiga pensará que no te damos de comer.

BOLICHE

¿Y tengo yo la culpa de tener el estómago como un furgón vacío?

JUANA

(A Tomasa, por el niño) Si ríe... ¡Está bueno! (Se oye pitar un tren)

RISITA

¡Que ha pitao el ciento siete, chica!

JUANA

¡Ya voy, padre! (Juana se dirige a cerrar la compuerta del paso a nivel, y al mismo tiempo se oye cantar la siguiente copla a Aniceto que sale a escena al decir el último verso)

ANICETO

(Dentro)

La moza que va a la corte

y se pone allí a servir,

como allí sirva pa algo

que no vuelva por aquí.

(Se oye ruido de tren en marcha)

RISITA

¡Chica, que está encima! (Por el tren)

JUANA

Ya voy. ¡Tomasa, vuelve al niño, que ya sabes que se asusta!

RISITA

¡Pues no tiés tú pocas precauciones con ese muñeco! ¡Ni que fuás su madre!

JUANA

(Suspirando) ¡Ay!

BOLICHE

Ya está aquí.

ESCENA II

Aparece en escena Aniceto con dos alforjas grandes, paquetes, etcétera, y se coloca de bruces en la puerta del paso a nivel figurando que ve pasar el tren; se quita el sombrero y saluda exageradamente. Juana se coloca de frente a la primera caja de arrojes, con el banderín levantado como dando paso al tren. Se oye el ruido de este y el silbato muy cerca. Boliche deja de sacar agua y hace señas de despedida hacia el sitio donde figura que pasa el tren. Todos los personajes miran en la misma dirección menos la Tía Moñitos que sigue roncando

BOLICHE

(A los del tren) ¡Eh! ¡Adiós, adiós!

ANICETO

¡Estúpidos!... ¡Feooos!... ¡Adiós! ¡Asín descarriléis!

RISITA

¡Calla, bárbaro!

ANICETO

(A Juana) Abre ya de una vez, mientras yo echo un trago. (Se aleja el ruido del tren poco a poco, y por la primera y última caja de arrojes sale humo a escena)

JUANA

(Abriendo la puerta) ¡Qué mal genio gastas!

ANICETO

Miá quien habla, y hay que echar memoriales pa saludarla desde que ha vuelto de los madriles.

MOÑITOS

(Dando un ronquido fuertísimo y despertando) ¡Chica!... Que ya debe estar cerca el ciento siete.

BOLICHE

¡Ja, ja, ja! Y tan cerca... ¡Místele el humo!

MOÑITOS

¿Pero ha pasao?

TODOS

¡Ja, ja, ja! (Aniceto se acerca a la puerta de la casilla y suelta las alforjas y la sombrerera)

MOÑITOS

¡Estaría distraída contando los puntos de la media!

RISITA

Esa media no se acaba nunca. ¡Hace veintitrés años que nos casemos y ya la habías empezao!

MOÑITOS

Mentira, que la empecé lo menos un mes después.

BOLICHE

¡Si no se ha mudao usté de medias desde entonces!

MOÑITOS

¡Gracioso!... ¡Tengo otras! ¡Miálas! (Enseña las puestas)

RISITA

¡Las del día de la boda; me acuerdo!

MOÑITOS

¡Bueno, dejadme en paz trabajar! (Haciendo media)

RISITA

Trabaja, pero no ronques tan fuerte, que no se oyen de venir los trenes.

MOÑITOS

(Levantándose) ¡Vaya, me voy adentro a descabezar el sueño! (Incomodada)

BOLICHE

¡Si ya le ha dejao usté sin cabeza!

MOÑITOS

¡Quita de ahí, estúpido! (Le da un empujón y va a parar encima del tío Risita)

ANICETO

Echeme usté un cuartillo. (Entran en la casilla la tía Moñitos y Aniceto)

BOLICHE

¡Ay!... ¡Vaya unos modos! ¿Ve usté?... ¡Si estuviera bien mantenido... (A Risita)

RISITA

¡Anda, imbécil! (Le da un empujón y entra en la casa)

BOLICHE

¡Ay! ¡ay! (Da un traspiés y pisa a Juana)

JUANA

¡Que me has pisao, bárbaro! (Pegándole y entrando en la casa)

BOLICHE

¡Ay! ¡Maldita sea!... ¡La han tomao conmigo! ¡Si tuviá la culpa el chico le daba así!

(Amenazando al niño. Tomasa da un cachete a Boliche)

TOMASA

¡Animal!

ESCENA III

Tomasa y Boliche, con la mano en la cara, quejándose.

TOMASA

(Levantándose después de dejar al niño en la cuna y acercándose a Boliche con zalamería) ¿Te he hecho daño?

BOLICHE

¡Sí, señora!... ¡ya no te quiero! ¡anda, rabia!

TOMASA

¡Si ha sido jugando!

BOLICHE

¡Pues no seas tan juguetona, que escuece! ¡Miá que pegar a su novio!

TOMASA

¡Chis! ¡calla!... ¡que te va a oír mi padre!

BOLICHE

No podrá hacer más que pegarme, que es lo que hace a toas horas. De desayuno me da tóos los días dos tortas, a medio día tres chuletas y pa cenar dos capones y una ensalá de golpes... ¡por eso dice que estoy bien mantenido!... y por eso no engordo.

TOMASA

¿No?

BOLICHE

No sé por qué me llaman Boliche. ¡Si no fuera por ti ya me había ido de tu casa!

(Pausa)

¿A que no sabes en lo que estoy pensando?

TOMASA

No.

BOLICHE

En una barbaridad mu grande.

TOMASA

¡Dila!

BOLICHE

Si es una barbaridá mu grande.

TOMASA

¿No se pué icir?

BOLICHE

¡Poderse icir, se pué icir too!

TOMASA

Pues dímelo, que no te oye nadie.

BOLICHE

¡Lo malo es que lo oigas tú!

TOMASA

Se me olvida en seguida... ¡Dímelo!

BOLICHE

Pues... estoy pensando en... ¡je!... ¡je!... en que ¡por qué no había de ser nuestro ese niño!

TOMASA

(Con inocencia) ¿Y cómo iba a ser eso!

BOLICHE

Pues... velay... ¡En eso estaba pensando! ¿No somos novios?... ¡pues la cosa más natural!

TOMASA

¿Y qué íbamos a hacer con él?

BOLICHE

¡Lo primero bautizarle!

TOMASA

¿Cómo le pondríamos?

BOLICHE

Boca abajo.

TOMASA

Si digo de nombre.

BOLICHE

¡Zampatortas!

TOMASA

(Enfadada) ¡Qué bonito! (Zampatortas! ¡vaya un padre cariñoso! ¡Le pondríamos un nombre dulce!

BOLICHE

¡Mazapán!

TOMASA

¡No piensas más que en comer!

BOLICHE

¡Si vieras las ganas que se me pasan de tirarte un bocao! ¡Anda, deja que te muerda!

TOMASA

(Rechazándole) ¡Quita!

BOLICHE

¡Pues muérdeme tú!

TOMASA

¡No me gusta la carne de cerdo!

BOLICHE

¡Si soy corderito!... ¡Cordero lechal, tiernecito! ¡muerde! ¡muerde!

(Música)

TOMASA

¡Miá que eres borrico!

BOLICHE

¡Miá que eres bonita!

Deja que te muerda.

TOMASA

¡Vamos!

BOLICHE

¡Deja!

TOMASA

¡Quita,

que me va cargando

verte tan hambrón!

BOLICHE

¡Yo qué culpa tengo

de ser comilón!

Desde el mismo día

que entré en esta casa

pa cuidar las bestias

y pa sacar agua,

igual que una bestia

me chiflé por ti,

y paso las noches

sin poder dormir.

¡Ay de mí! ¡Ay de mí!

(Suspirando exageradamente)

Y paso las noches

sin poder dormir.

II

TOMASA

Desde el mismo día

que entraste en mi casa,

yo empecé a ponerme

pálida y delgada,

y es que me chiflaste

en cuanto te vi,

y las noches paso

suspirando así:

¡Ay de mí! ¡Ay de mí! (Como él)

Y soñando a voces

y pensando en ti.

BOLICHE

De pensarlo tengo

carne de gallina.

TOMASA

(Enfadada)

Otra vez la carne,

vuelta a la comida.

BOLICHE

Se me hace jalea

todo el corazón.

TOMASA

Sin comer va a darnos

una indigestión.

¡Tragón!

BOLICHE

(Riéndose)

¡Je! ¡je!

TOMASA

¡Glotón!

BOLICHE

¡Je! ¡je!

TOMASA

¡Hambrón!

BOLICHE

¡Je! ¡je!

TOMASA

¡Comilón!

¡comilón, comilón!

BOLICHE

(Cogiéndola una mano)

Primero te comía la yemita

de este dedito,

después te daba aquí en la muñequita

un bocadito;

después la mano entera, que ya es mía,

me la comía

de un solo bocao

en estofao...

También la nuececita te partía

en pedacitos;

también las orejitas te comía

a bocaditos;

haría de ti un picadillo

metiéndote en un panecillo,

llevándote en este bolsillo,

(Señalando al estómago)

y si tenía indigestión,

era un alegrón.

TOMASA

Tragón, tragón, tragón.

Glotón, glotón, glotón.

(Hablado)

TOMASA

(Al terminar el número de música, dice asustada, viendo venir al tío Risita) ¡Mi padre! (Coge al niño y se sienta acunándole)

BOLICHE

¡Ese sí que muerde!

TOMASA

¡Ah! ¡ah! ¡ahí (Meciendo al niño)

BOLICHE

(Sacando cubos de agua muy deprisa) ¡Siete! ¡Ocho! ¡nueve!

ESCENA IV

Dichos y Tío Risita, con un ato de verde segado y una hoz en la mano.

RISITA

¿No está llena toavía?

BOLICHE

(¡Uy, trae la hoz... me siega!)

RISITA

(Con malos modos) ¿Que si no está llena? Tú, chica, ¿vas a estarte too el día con el crío a cuestas?

TOMASA

¡Si no se duerme!

RISITA

¡Echale de una vez! ¡que nos ha caído la lotería con el chico!... ¿Has encerrao los conejos?

TOMASA

Ahora iba.

RISITA

¡Vamos, vivo!

TOMASA

Ya vamos.

RISITA

Sin asustarlos, que ya sabéis que están en cría. (Se pone a quitar los cubos de las sogas hasta que hacen mutis Boliche y Tomasa)

BOLICHE

(¿Ves, ves? ¡Aquí to el mundo está en cría menos nosotros!)

TOMASA

(¡Pero, chico!)

BOLICHE

(¡Que estamos en ridículo, ea!)

RISITA

Y tráete la cabra, que está atá aonde siempre.

BOLICHE

¿La cabra?... (¿Aónde estará el puchero?)

TOMASA

(Vaya, vas a tener formalidá)

BOLICHE

(Toa la que pueda, ¡que no será mucha!)

TOMASA

(Es que si no, no voy)

BOLICHE

(Si lo estás deseando)

TOMASA

(¡A ver si me coges!) (Mutis al campo, corriendo)

BOLICHE

(Lo menos dos pellizcos... ¡pa que me llames tonto!) (Mutis tras ella)

ESCENA V

Tío Risita, Aniceto y después Juana.

ANICETO

(Saliendo de la casa) Vaya, que falta media hora pa el mixto y dos kilómetros pa Villalba; a ver si no le cojo. (Recoge del suelo las alforjas y los paquetes)

RISITA

¿Vas pa la corte?

ANICETO

Como tóos los jueves por la noche; ¡pa tomar el viernes por la punta!... ¡Lo que es encargos no faltan, no!

RISITA

Sí que será pesao toas las semanas... pues hasta mañana. (Sale Juana de la casa)

ANICETO

¿No quié usté na?

JUANA

Yo sí, espera.

RISITA

¿Está haciendo tu madre la cena pa los obreros?

JUANA

Está durmiendo.

RISITA

¡Maldita sea!... ¡La voy a espabilar pa un rato! ¡Moñitos, Moñitos! (Entra en la casa muy incomodado)

ESCENA VI

Juana y Aniceto.

JUANA

¿Me quiés hacer un favor?

ANICETO

Si está en mano...

JUANA

Ya sabes que estoy para casarme.

ANICETO

Eso se dice en el pueblo.

JUANA

Con Félix el maquinista que baja en el exprés.

ANICETO

¡Algo más se dice en el pueblo! (Con intención)

JUANA

¿De mí?

ANICETO

¿De quién va a ser?... ¡Habladurías!... sigue.

JUANA

¿Pero qué dicen?

ANICETO

Sigue, mujer, sigue; ¿qué favor quieres?

JUANA

Félix, cuando pasa en el tren, dos veces por semana, me echa las cartas.

ANICETO

(Con guasa) Volarán con el aire.

JUANA

Como pasa de noche, no las ve nadie; yo me levanto antes que amanezca pa dar paso al correo y las recojo.

ANICETO

Bueno, ¿y qué?

JUANA

Que las dos veces de la semana pasada no me ha echao carta.

ANICETO

¡Se habrá cansao de escribir!

JUANA

Yo le he escrito y no me ha contestao, y tengo una zozobra que no vivo.

ANICETO

(Con intención) Pué que se haiga enterao de algo... y el hombre no esté conforme.

JUANA

¡No te entiendo!... ¿Qué quieres decir?

ANICETO

¡Yo na... allá tú y él!... En fin, ¿qué favor quieres?

JUANA

Que me lleves esta carta a Madrid a casa de Félix; quiero tener la seguridad de que la recibe. Hoy va a pasar en el exprés, y si no me echa carta, quiero que cuando vuelva a Madrid se encuentre la mía.

ANICETO

Si no es más que eso, la encontrará.

JUANA

Gracias.

ANICETO

Pero sin meterme en na... porque luego sus arregláis ó sus matáis, y el que queda mal es el que queda mal.

JUANA

Es necesario que lea esa carta... ¡y Dios quiera que me crea!

ANICETO

(Me parece que no te cree... es mu gordo el lío)

JUANA

(Llorando) ¡Si no me cree me muero!

ANICETO

(¿Lagrimitas?... Toas lo mismo. ¡Primero a pecar... y luego Madalenas!..) (Mutis primera izquierda cantando la copla de salida)

ESCENA VII

Juana: a poco el Tío Risita.

JUANA

¿Por qué me hablará así este hombre? ¿Habrá sospechado?... ¡Imposible!... ¿Quién había de contar?... ¡Qué necesidad tengo de que Félix lo sepa todo... todo y pronto! (Se acerca a la cuna)

RISITA

(Saliendo) ¡Juana!

JUANA

¿Qué, padre?

RISITA

¡Pero estáis entontecías con el chico! ¡no hacéis otra cosa ni tu hermana ni tú! ¡Estoy más harto del crío ese!

JUANA

¡Pobrecito! ¡pues poca guerra da!

RISITA

¿Poca? Es un engorro y un compromiso.

JUANA

¿Qué, le estorba a usted?

RISITA.

Me estorba, sí, señor, que me estorba. Está robándonos el tiempo pa tó. Mañana mismo vas a escribir a tus señoritos de Madrid a ver si mandan por él.

JUANA

¿Separarnos del niño? (Con pena)

RISITA

Pues vaya una cosa.

JUANA

Eso sería quedar mal, porque yo me he comprometido a que ustedes le tengan hasta que nos lo pidan y...

RISITA

Pero por las trazas, no lo van a pedir nunca... uno hace las cosas sin pensarlas, y luego las piensa, y... vaya que no me da la gana. Los chicos con sus padres, y que cá uno cargue con lo suyo, que es lo que está en el orden. En los pueblos se habla mucho de más; tú eres ¡•oliera, estás pa casarte con un hombre honrao que parece que te quiere; nadie está libre de una mala intención, y si le hicieran ver lo blanco negro...

JUANA

Félix es protegido de mi señorito; me ha conocido en casa de mis amos; ellos han arreglao esta boda.

RISITA

Peor que peor.

JUANA

¿Por qué?

RISITA

¡Vaya!... ¡me harás hablar!.,. ¡Pa que lo sepas! Esta mañana he bajao al pueblo... y ojalá que no hubiera bajao.

JUANA

Se atreven a pensar...

RISITA

¡A pensar y a decir!... ¡Es unánime!

JUANA

¿El qué?

RISITA

(Dudando) Que el niño es tuyo.

JUANA

¡Jesús! (Tapándose la cara con las manos y rompiendo a llorar)

RISITA

¡No llores!... ¡Si ya sé que es mentira!... Si fuera verdad... ¡cómo te habías de haber atrevido a mandárselo a tu padre!... ¡Too menos eso!... ¡Estoy seguro!

JUANA

Pero, ¿quién ha podido inventar?...

RISITA

Cualquier desocupao. Te han visto cuidarle y acariciarle... y muchas veces el tener buen corazón hace tener mala fama. En el pueblo viven tres ó cuatro empleados de la línea que van y vienen tóos los días a Madrid. Hace tres días que ha llegado el asentador nuevo de la vía; ese mismo.... ú otro, ¡ú el demonio! ya te lo he dicho; lo dicen tóos y no lo calla ninguno. Por eso quiero que mañana bajemos tú y yo al pueblo con el chico y hacemos que le lleve a Madrid el más chismoso del pueblo, pa que oiga de boca de sus padres, cuando le reciban, lo que debe decir un padre cuando recibe a su primer hijo.

JUANA

(Esforzándose por parecer tranquila,) Está bien... Dentro de tres días no estará aquí el niño... (Aunque me muera)

RISITA

Eso quiero.

JUANA

Y eso será.

RISITA

¡Miá que decir de ti! ¡Vamos, si no sé cómo no le di a uno!... ¡Debían hacer picadillo con las malas lenguas!... (Pobrecilla!... ¡Cá!... imposible! (Mutis al campo)

JUANA

(Desesperada después de salir Risita, arrojándose sobre la cuna y dando muchos besos al niño) ¡Hijo! ¡Hijo de mi alma!

ESCENA VIII

Juana.

(Música)

JUANA

Los que hacen las leyes

son unos infames,

que dejan que viva

un hijo sin padre,

y pierde la honra

quien vida le dio,

y la honra no pierde

quien le engendró.

Encierran al que roba

y al que asesina,

y al que en defensa mata

la ley castiga;

y el hombre que cobarde

su nombre miente,

alzar puede su frente

por donde va.

¡Maldito el mundo sea!

si así es el mundo.

Siempre la maldad

loca triunfará.

¡Hijo del alma, (Desesperada)

yo soy tu madre;

hijo adorado,

no tienes padre;

nombre no tienes,

hijo querido,

que te lo roba

tu padre mismo;

yo mis caricias

darte no puedo,

siempre a escondidas

te robo un beso,

y ese castigo

me lo merezco!

¡Maldito el mundo sea!

si el inocente

ha de humillar vencido

triste su frente;

siempre la maldad

loca triunfará.

Sufra el castigo yo

y mi hijo no.

ESCENA IX

Juana y Guardias 1° y 2° en traje de camino con los tricornios enfundados de blanco; se les ve llegar por la carretera.

(Hablado)

GUARDIA 1º

¡Buenas tardes!

JUANA

Muy buenas.

GUARDIA 2º

¡Y fresquitas!

JUANA

¡Hoy si ha apretao el calor!

GUARDIA 1°

Es el tiempo de ello.

JUANA

¿Se va de retirada?

GUARDIA 1°

¡Sí retirada!

JUANA

¿Quieren ustedes algo?

GUARDIA 2º

¡Lo de todas las tardes! ¡Sorbete de pozo!

JUANA

¿Quieren ustedes un jarro de vino? ¡Está fresco!

GUARDIA 1°

El vino le da cólico al tricornio.

JUANA

Pues ahí va el botijo.

GUARDIA 1º

¡Venga la gracia de Dios! (Bebe a chorro) ¿Y cuándo es esa boda?

JUANA

¿Usté sabe?

GUARDIA 1°

Me lo dijo ayer el secretario del Ayuntamiento.

GUARDIA 2º

¿Y quién es el novio?

GUARDIA 1°

¡Quién va a ser! ¡El padre del niño! (con naturalidad)

JUANA

(Asombrada ) ¿De qué niño?

GUARDIA 1°

¡Del de usté! ¿No tiene usté un hijo?

JUANA

¡No Señor! (Conteniendo la indignación) ¡Es de mis amos de Madrid! El jefe de vías y obras.

GUARDIA 1°

Pues usté dispense, pero me habían dicho... ¡Vamos, de esas cosas que se dicen sin importancia!

GUARDIA 2º

Yo también había oído... ¡pero, claro, no se hace caso! ¡Ya está uno acostumbrado!

GUARDIA 1º

Tú, vámonos, que ya baja la cangreja con los obreros de la vía: son las siete.

GUARDIA 2º

Hoy sí que han trabajao de firme; debe tener malas pulgas el asentador nuevo.

GUARDIA 1°

¡Vaya! ¡Salud!

JUANA

Hasta mañana, (Con malos modos)

GUARDIA 2º

(Pa qué le has dicho nada; ¡se ha enfadado!)

GUARDIA 1º

1¡Yo creí que era cosa pública! ¡Como todo el mundo lo Sabe!) (Mutis la pareja por la primera izquierda)

JUANA

¡Todos! ¡Todos! ¿Quién habrá sido el infame?

ESCENA X

Juana, Obreros 1°, 2°, 3° y 4°, con pantalones de percal azul, en mangas de camisa y sombreros de paja de alas grandes y deformados; las blusas al hombro; el 1º lleva una espuerta con herramientas; el 2° una barra grande de hierro; el 3º una cuba de madera para agua, vacía, y el 4.° palas y picos. Después Ezequiel, que vestirá como los asentadores de vía.

EZEQUIEL

(Dentro y con malos modos) ¡Bueno! ¡Para la cangreja! ¿A dónde vais, estúpidos? ¡No veis que es cuesta abajo!

JUANA

(Extrañando la voz) ¡Eh!

EZEQUIEL

¡La herramienta primero! ¡Así no!

OBRERO 1°

(Saliendo) ¡Buenas tardes, Juana! (Dejando la espuerta cerca de la casa)

JUANA

Buenas.

OBRERO 1°

¿Has visto qué geniecito tiene el nuevo asentador?

OBRERO 2°

(Saliendo) ¡Buenas tardes! ¡Vaya un genio de nombre!

OBRERO 3°

(Saliendo) Nos ha caído la lotería con el tío este...

EZEQUIEL

(Saliendo ) ¡A ver! ¡Vino fresco!

JUANA

(Asustada al verle) ¡Jesús! ¡Ezequiel!

EZEQUIEL

¿Qué pasa, joven?

JUANA

¡Maldita sea!

EZEQUIAL

(Con sorna, después de esperar a que se marchen los Obreros y de mirar en todas direcciones) ¿No me esperabas?

JUANA

¡Ni me acordaba que existías!

EZEQUIEL

¡Esa no cuela!

JUANA

¿A qué vienes? ¿Qué quieres?

EZEQUIEL

¡Me han destinado a este trozo de la línea! De algo le han de servir a uno las influencias.

JUANA

¿Tú has pedido?...

EZEQUIEL

¡Natural! ¡Pa verte! ¡Tú a huir de mí, yo a buscarte y a ver quién se cansa antes!

JUANA

¿Y para qué me buscas? ¿Para martirizarme?

EZEQUIEL

Según caigan las pesas. ¿O crees tú que un hombre como yo, ¡muy hombre! que tié derechos sobre una mujer, se conforma con que ésta le diga: Basta, hasta aquí ha llegao, y si te vi no me acuerdo?

JUANA

¡Derechos! ¿Qué derechos tienes sobre mí?

EZEQUIEL

(Señalando a la cuna) ¡Algo que no se borra!

JUANA

(Con dignidad, señalando también a la cuna) ¡Ahí le tienes! ¡Mírale! ¡Es tu hijo! Y sin embargo, ni él ha de saber nunca que eres su padre, ni yo quiero acordarme de tu nombre.

EZEQUIEL

¡Ezequiel, Ezequiel me llamo! ¡No te se puede olvidar! (Con ironía)

JUANA

Ni a ti tampoco que me engañaste cobardemente haciéndome creer que eras libre, y cuando vi perdida la esperanza de que cumplieras tus juramentos de hacerme tu mujer, a punto de ser madre, sin padre para mi hijo, me juré a mí misma no volverte á ver y se trocó en aborrecimiento y desprecio tó el cariño que antes te había tenido.

EZEQUIEL

¡Pamplinas pa los canarios! ¡Cuando las cosas no tién remedio, no tién remedio! ¿Voy a matar a mi mujer?

JUANA

¿Y por qué me dijiste que eras soltero? (Indignada)

EZEQUIEL

(Con sonrisa burlona) ¡Armas de combate! Eso se dice siempre, y la que es viva se entera, y la que es tonta cae.

JUANA

Y la que es honrada, antes de quitar a otra mujer con más derechos un pedazo de cariño, y antes de robar a otros hijos con toas las de la ley un pedazo de pan, se muere y se pudre sin pan pa ella, sin nombre pa su hijo y sin honra pa el mundo. ¡Esa, esa soy yo! ¡Vete!

EZEQUIEL

(Con sorna) ¿Y te vas a comer el crío?

JUANA

¡Eso no es cuenta tuya! ¡Nadie lo sabe más que tú y mi señorita, que me ha ayudao a engañar a mis padres!

EZEQUIEL

Y te ha buscao un novio pa que no te quedes sin marido, ni tu hijo sin padre. ¡Buen papel le destináis al pobrecillo! (Despreciativamente)

JUANA

(Indignada) ¡Eso no! Acabo de escribirle, con tesándole toda tu infamia y mi desdicha... y si supiera que no había de perdonarme... esta noche, al paso de su tren, me arrojaba debajo, para que él mismo me despedazara el cuerpo corro tú me has destrozado el alma.

EZEQUIEL

Y si te perdona, después de la boda me ves un día, te enloqueces y... (Con presunción)

JUANA

¡Primero muerta cien mil veces!

EZEQUIEL

¡Son pocas!... ¡Pon ciento cincuenta!

JUANA

¡Ven! ¡Acércate! ¡Aquí! ¡Con tu hijo por testigo! ¡Oyeme bien! ¡Me has conocido cordera y me encuentras loba! ¡Por mis padres! ¡Por mi hijo! ¡Que se me mueran todos... todos... que me quede sola en el mundo, abandonada, perdida, si yo, suceda lo que suceda, vuelvo a acercarme a ti ni pa saludarte! ¡Todos, que se me mueran todos, y yo la primera!... ¡Lo juro por este inocente, que es lo que más quiero en este mundo!

EZEQUIEL

(Con calma y mucha sorna) ¡Bonito juramento de folletín! Ahora oye el mío: Lejos ó cerca del chiquillo, como quieras, ¡pero óyelo bien!.. ¡Que me lisie, que se me afeen las faciones, que me vea en un hospital, defectuoso é inservible, si tú no agarras el crío ahora mismo y te vienes a Madrid en mi seguimiento, como es tu deber y mi voluntad!.... ¡Recapacita! (Pequeña pausa)

JIANA

¡Vete!

EZEQUIEL

¡Con vosotros! (Imperativamente)

JUANA

¡Solo!

EZEQUIEL

(Acercándose a ella y cogiéndola de las manos) ¡No sabes que estoy loco por ti; que por lograrte te engañé, y que tú no pues ser de nadie más que mía!... ¡De nadie! ¿Lo oyes bien? (Con tono amenazador) ¡De nadie!

JUANA

Solo ignorándolo puede querer una mujer decente a un hombre que no es libre... ¡Déjame para siempre! ¡Vete!

EZEQUIEL

¡Ea, basta! Agarra el chico y echa pa alante, ¡O le agarro yo! (Dirigiéndose a la cuna con decisión)

JUANA

(Interponiéndose) ¡No! ¡Si tocas a mi hijo, no respondo de mí! ¡Es mío solo! ¡Mío! (Con energía)

EZEQUIEL

¡Así te quiero... fiera!

JUANA

¡Fiera para aborrecerte, fiera para defender a este pregón de mi deshonra y fiera para querer al hombre que ha de vengarme de tu infamia!

EZEQUIEL

¿Para quererle has dicho? (Furioso)

JUANA

¡Con mi alma entera!

EZEQUIEL

¡Calla! (Exaltándose aun más)

JUANA

Sí. ¡Le quiero tanto como a ti te aborrezco!

EZEQUIEL

(Desesperado, fuera de sí) ¡Ah! (Con valentía) ¡Le has sentenciao! ¡Ya no soy hombre... soy fiera como tú... más que tú! ¿Hay uno a quien quieres? ¡Pues ese me estorba! ¡El presidio antes que verte de otro! ¡Por estas! (Jurando. Se dirige como loco al sitio en que dejaron los obreros las herramientas y coge algunas dirigiéndose a primera izquierda)

JUANA

(Sujetándole) ¿Dónde vas?

EZEQUIEL

¡A enterrar ese cariño como tú quieres enterrar el mío!... ¡Va a pasar en el tren!... ¡Aun llego a tiempo! ¡Si le quieres como dices, reza por él!

JUANA

(Sin soltarle) ¡Espera!

EZEQUIEL

¡Estoy loco! ¡No soy yo! ¡Suelta! ¡Quita... quita! ¡Que no se me escape! ¡Aun llego a tiempo! (Da un tirón y logra desprenderse de las manos de Juana, y hace mutis primera izquierda corriendo como loco. Juana trata de seguirle)

JUANA

¡Ah! ¡No! ¡Ezequiel! ¿Qué vas a hacer? ¡Ahí ¡La vía! ¡El tren! ¡No, yo impediré!... (Intenta dirigirse a la caseta donde están colgados los banderines) ¡No puedo! ¡Hijo!... ¡Hijo mío!... (Vacila  y cae desmayada cerca de la cuna. Fuertísimo en la orquesta. Telón rápido)

MUTACION

CUADRO SEGUNDO

Telón corto de campo; paralelos al público la vía y los postes telegráficos, en alto sobre un terraplén; hace curva la línea, y al foro derecha se ve, a lo lejos, la casilla del primer cuadro, una ó dos matas de juncos altos, una cabra atada a un palo. Es de noche.

ESCENA PRIMERA

Boliche por la derecha con un conejo muerto en una mano y un puchero grande en la otra. Detrás Tomasa.

BOLICHE

¡Ahora... ahora es cuando me la gano!

TOMASA

¿Pero qué has hecho?

BOLICHE

¡Ya yes; matar un conejo!

TOMASA

¿Y para qué le has tirao el palo?

BOLICHE

¡Pa encerrarle! El corría, corría; yo detrás diciéndole: ¡eh, conejo! anda pa casa, acuéstate que es tarde... nada, que no tenía sueño; hay conejos trasnochadores; le tiro pa

asustarle... y cadáver.

TOMASA

¿Pa qué no le entierras pa que no le vean?

BOLICHE

¡Y le desentierra el perro y es peor! Pa que no le vean ya ¡sé yo lo que tengo que hacer:

comérmele.

TOMASA

¿Y dónde le guisas?

BOLICHE

En crudo; ¡con pellejo y tó pa abrigarme el estómago!

TOMASA

¿Ves?... ¡Por atolondrao!

BOLICHE

Tú tiés la culpa; ¡embobao contigo!

TOMASA

¿Pa qué eres bobo?

BOLICHE

¡Pa qué eres guapa! ¡Guapa! ¿pa quién eres tú?

TOMASA

Pa mi Boliche.

BOLICHE

¡Eso, y yo pa ti... y el conejo pa los dos!

TOMASA

¡Y la paliza pa ti solo!

BOLICHE

¡Egoisma!

TOMASA

Y la cabra, ¿qué vas a hacer?

BOLICHE

¡Bebérmela!

TOMASA

Tú no escarmientas.

BOLICHE

El que no escarmienta es tu padre que me sigue mandando a por ella.

TOMASA

¿Pues sabes lo que te digo?... que a mí no me gusta un novio que tó se le va por la boca.

BOLICHE

No, si no se me va ná: ¡me lo trago too!

TOMASA

Así estás tú, que pareces un cebón.

BOLICHE

Iznoranta: mira, en la Historia Sagrada toas son cosas de comer; ya ves si es antiguo. ¿Por qué has nació tu?

TOMASA

Porque... por... ¡vaya una pregunta!

BOLICHE

No, señora; tú has nació porque Eva se comió una manzana; por eso... y porque Adán le tomó el gusto y ripitió con otra manzana: si no ripite, no naces, ¡pa que te enteres!

TOMASA

¿Y eso qué?

BOLICHE

Cuando Judas vendió a Cristo... ¿dónde fue?... en un banquete, ¿no has visto las estampas?... ¡los doce apóstoles come que come! ¿Cómo se represéntala Pasión? ¡Con un gallo! Cuando nació el niño Dios en un portal, ¿qué le llevaban las gentes? Corderos, pavos, tortas... y pan pintao; ¿qué hacían allí los pastores?... comer migas al fresco; ¿qué hacían el buey y la muía?... comerse la cama del niño: más atrás, ¿por cuánto vendió a Esaú la projimonitura? ¡por un plato de lentejas! Cuando el diluvio, ¿pa qué encerró Noé en el arca un par de animales de cá especie, incluso la nuestra?

TOMASA

Pa salvarlos.

BOLICHE

¡Pa comérselos en el viaje!... (Desde aquí muy deprisa hasta el final) ¿Y el festín de don Baltasar? ¿Y las bodas del señor Camacho? ¿Y too el chocolate que se han tornao los frailes en España? ¿y too lo que se comen los Ayuntamientos, que no hay quien lo digiera? ¿y el pan nuestro de cada día, dánosle hoy... pa que esté tiernecito?... y modernamente, ¿cómo se arregla tó en España? ¡con banquetes! porque tripas llevan pies y el que no llora no mama y hártate comilón con pasa y media, ¡pa que aprendas!

TOMASA

Pero tú no cuentas tos los que han reventao de cólico.

BOLICHE

Pero cuento con un estómago privilegiao.

TOMASA

¡No te quiero!

BOLICHE

¡Y dale! ¿te gustaría tísico?... ¿quiés por novio un fideo amarillo?... pues soy macarrón y tú albondiguilla; y en cuanto el cura nos eche la salsa... ya verás tú qué manera de mojar pan... ¡y a que ripites como Adán y Eva!

TOMASA

¡Chico... que va a pasar el exprés! ¡vamos pa la casilla!

BOLICHE

Anda tú delante que yo tengo que arreglar lo del cadáver este.

TOMASA

Pero no te tardes, que si mi padre te echa de menos...

BOLICHE

Le dices que estoy recogiendo el último suspiro. (Medio mutis Tomasa) ¡Ah!... (Llamándola) pero no le vayas a decir lo que hemos hecho con el conejo. (Mutis Tomasa por la derecha corriendo.

ESCENA II

Boliche; a poco Ezequiel, que atraviesa la escena de derecha a izquierda corriendo y mirando hacia atrás y con las herramientas que cogió en el cuadro primero.

BOLICHE

¡Gracias a Dios que estoy solo! ¡Hola, amiga! (A la cabra) ¿Cómo andamos hoy de...?

¡con verlo basta! ¡Aquí está el puchero!... ¡Con cuatro de estos aviao pa un rato! (Se arrodilla al lado de la cabra para ordeñarla, en cuyo momento Ezequiel atraviesa la escena corriendo) ¡Eh! (Asustado) ¡Uy, un automóvile! ¿Dónde irá ese tan aprisa? ¿y quién es ese? paece un obrero... (se pone de pie) ¿habrá pasao algo en la vía?... (Escuchando) ¡no se oye na! (Vuelve a arrodillarse al pie de la cabra con el puchero en la mano) La verdá es que no sé por qué voy a molestarme en llenar el puchero pa vaciarle en seguida. ¡Estoy por chupar diretamente!

           

ESCENA III

Boliche y Guardias Civiles 1° y 2°, saliendo por la derecha.

GUARDIA 1°

¡Eh! ¿Qué se hace ahí?

BOLICHE

(Poniéndose de pie) Pues... (Vaya un susto; ahora se me corta la digestión)

GUARDIA 2º

¿No has oído?... ¿Qué haces aquí?

BOLICHE

¡Estaba dando de comer a la cabra!

GUARDIA 1°

¡Si es el criao del tío Risita el guardabarrera!

BOLICHE

El mismo, servidor, pa servirles...

GUARDIA 1°

Ya estás tú buena pieza; ¿apostamos a que te estás bebiendo la leche?

BOLICHE

Sí, señor.

GUARDIA 1°

¡Eh!

BOLICHE

Que sí, señor; que apostamos a que no... y si no que me registren.

GUARDIA 1°

¡Pues nada bueno te trae a estas horas por aquí! ¡Anda, anda para la casilla! (Mutis los Guardias Civiles por la izquierda)

BOLICHE

¡Sí, señor! Que ustedes se alivien... cólico... cólico del susto y mañana... ¡mañana sin puchero desde el principio!

ESCENA IV

Boliche y Tomasa, corriendo por la derecha.

BOLICHE

¡Atiza! ¡Otro que corre! ¡Esto es un coche parao!

TOMASA

(Saliendo) ¡ Ay, Boliche! (Apurada y casi llorando)

BOLICHE

¿Vienes a buscarme? ¿Para algo?

TOMASA

¡La Juana que está muy mala! ¡Que no vuelve!

BOLICHE

¿Pues dónde ha ido?

TOMASA

¡Que la ha dao una cosa y no vuelve en sí! Al principio creíamos que estaba dormía, pero estaba priva.

BOLICHE

¿De qué?

TOMASA

¡Sin sentido!... ¡Como muerta!

BOLICHE

Eso será debilidaz.

TOMASA

¡Cá! Algo que la ha pasao... porque estaba tira en el suelo al lao del chico.

BOLICHE

¡Cuando yo te digo que me choca ese chico, chica!

TOMASA

¡Le quiere!

BOLICHE

¡Demasiao! Pa mí que el aire de los madriles le ha sentao mal a tu hermanita. (Con intención)

TOMASA

¡Quita de ahí, mal pensao! ¡Si es soltera!

BOLICHE

¡Je, je! ¡Anda ésta! ¡Vaya una cosa! También es soltera la hija del alcalde; y soltera está la hija del sacristán, y mi tía...

TOMASA

¡Eh!

BOLICHE

Y mi tía dice que vaya un pueblecito.

TOMASA

 ¡Ay! Boliche, por Dios! ¡Vete corriendo! ¡Qué va a pasar el exprés, y padre y madre no se puen separar de la Juana!

BOLICHE

¿Pero tan mala está?

TOMASA

¿Que será, Dios mío, qué será? (Mutis corriendo, izquierda)

BOLICHE

Un sincope... y si no la dan de comer se muere... ¡Esa chica está como ensimisma en sigo misma! Milagrito será que yo me equivoque... (A la cabra) Vaya, despensera, pa casa; de estómago agradecido y pa correr más te voy a llevar a cuestas, pero no te arregostes, ¿eh? (Se echa la cabra a cuestas) ¡Ajajá! Si mientras corro pudiera ir chupando... ¡Con el traqueteo saldrá más fácilmente!... (Coge el conejo y el puchero) ¡Corre, caballito, vamos a Belén!... etc. (Mutis corriendo derecha)

(Preludio descriptivo en el que se oyen primero golpes de hierro sobre hierro, la voz de Aniceto cantando la copla del cuadro primero; el silbato del tren que se acerca, ruido de tren en marcha rápida, silbidos repetidos y estrépito de descarrilamiento; ayes y gritos dentro. En el fuertísimo final del preludio queda el teatro totalmente a obscuras breves instantes, y al volver a iluminarse aparece a la vista del público el cuadro siguiente)

MUTACION

CUADRO TERCERO

Decoración a todo foro que representa la línea del ferrocarril atravesando la escena; postes telegráficos; a lo lejos se ve la casilla del cuadro primero; en el centro de la escena un tren descarrilado con los vagones unos sobre otros, la máquina inclinada hacia el público; los coches serán de lujo y de primera clase; la máquina conservará la caldera encendida y echará humo por la chimenea. Es de noche. Efecto de luna.

Al levantarse el telón correrán algunos viajeros de un lado a otro asustadísimos. El Fogonero y el Guardafreno estarán al lado de la máquina, reconociéndola por todas partes; a la izquierda del espectador, en segundo término, una señora desmayada en el suelo, apoyada la cabeza en el brazo de otra viajera que está de rodillas a su lado; un viajero inclinado hacia ellas aplica un frasco a la boca de la desmayada; otra señora, a los pies del grupo, llora exageradamente; el Conductor del tren, en este grupo, procurando tranquilizarlos. En el centro, dos señoras de tipo extranjero, forman otro grupo con el del «Sliping-Kar», disputando acaloradamente; éste llevará peluca y bigote rubios, y el uniforme exacto de dichos empleados; las señoras tendrán sacos de mano; todos los viajeros vestirán con elegancia; en el suelo, maletas, portamantas, etc.

Hasta que la orquesta no apiana, no comenzará el diálogo, y antes sólo se escucharán ayes, gritos y lamentos; durante todo el cuadro no cesa la orquesta, aunque pianísimo. Todo el diálogo deberá ser rápido, pero no embarullado.

Mucha animación y mucha propiedad requiere este cuadro para hacer el efecto que ha hecho en Madrid. Los señores directores de escena, podrán, según las condiciones de los escenarios, variar la colocación de los personajes, y a su buen juicio encomiendan los autores la realidad del cuadro.

En las capitales y teatros de primer orden será indispensable, por lo menos construir el trasto entero del tren, semejante al de Madrid, el aparato para imitar el ruido del vapor, que no cesa de sonar en todo el cuadro, y el del humo de la máquina. En capitales y teatros de menor importancia, bastará con un aplique ó trasto que haga suponer ocurrida la catástrofe entre cajas, pero siempre viéndose parte de la maquinaria descarrilada y encendida. Sería conveniente para los primeros que se dirigieran al escenógrafo señor Martínez Garí, que tan magistralmente ha interpretado la idea de los autores presentando un cuadro de tal realidad que impresiona y constituye un triunfo escénico de primer orden.

ESCENA UNICA

Guardias 1° y 2°, el Tío Risita, Obreros 1°, 2º, 3º y 4°, Ezequiel, el Fogonero, el Guardafreno, el Interventor, el del Sliping-Kar, Viajeros; luego Boliche, y después Juana y la Tía Moñitos.

INTERVENTOR

¡Calma, calma!

VIAJERO 1º

¿Pero no hay botiquín?

VIAJERA 1ª

¡Qué escándalo!

INTERVENTOR

Ya han ido a avisar al pueblo.

GUARDIA 1°

(Saliendo y dirigiéndose al grupo de la máquina) ¿Cómo ha sido?

GUARDIA 2°

(Dirigiéndose al salir al grupo primero) ¿Hay heridos?

OBRERO 1°

(Saliendo precipitadamente y poniéndose a reconocer la vía bajo la máquina) ¡Esto parece imposible, sin pendiente!...

FOGONERO

¿Y el maquinista? (Alarmado)

RISITA

(Saliendo con una antorcha encendida y dos apagadas y el farol de señales) ¡Es verdad! ¡Félix, Félix! (Llamando a grandes voces)

GUARDIA 1°

A ver en la cuneta. Puede haberle despedido la máquina.

FOGONERO

¡Aquí está! (A gritos)

EZEQUIEL

(Que habrá salido detrás de los Obreros 3° y 4° pero pausadamente) ¿Pero vivo? (Con interés)

GUARDIA 1°

Sí; respira.

EZEQUIEL

(¡Vivo, maldita sea!) (Contrariado)

GUARDIA 1°

Un almohadón de un coche, y al pueblo con él.

RISITA

Más cerca está la casilla.

GUARDIA 1°

Pues a tu casa.

GUARDIA 2º

(A un obrero) Tú a escape al pueblo; el médico y el Juez; y tú a la estación: obreros y un tren de socorro.

OBRERO 2°

¡Volando!

OBRERO 1°

¡Ah! (Dando un grito de sorpresa: todos le rodean: Ezequiel queda más distanciado y con inquietud)

TODOS

¡Qué!

OBRERO 1°

¡Aquí: luces!

GUARDIA 1º

¿Qué pasa?

OBRERO 1°

Que estos rails no han sido desprendidos por el tren; lo estaban ya.

GUARDIA 1°

¡Cómo!...

EZEQUIEL

Tú ves visiones. (Con calma)

OBRERO 1°

Los tornillos no están saltados ni rotos, y el firme de la tierra está movido; aquí había desprendidos dos rails.

OBRERO 3°

¡Y es el trozo que asentamos ayer!...

OBRERO 1°

(Con energía y convicción) El descarrilamiento no ha sido casual, ¡lo puedo jurar!

GUARDIA 1°

¿Pero quién puede?...

EZEQUIEL

¡Nadie; no haga usté caso! (Despreciativamente)

GUARDIA 1º

Hemos recorrido la vía tres ó cuatro veces y no hemos visto a nadie.

GUARDIA 2º

A nadie.

BOLICHE

(Saliendo) ¿Qué pasa aquí?

GUARDIA 1º

¡Ah, sí! Este estaba como escondido.

GUARDIA 2°

¡Es verdad!

GUARDIA 1°

¡Este ha sido!

BOLICHE

¿El qué?

GUARDIA 1°

En la cárcel te lo dirán por asesino.

BOLICHE

¿Asesino?... ¡Se habrá muerto la cabra!

INTERVENTOR

¡Ya está esto listo! (Entre varios sacan al maquinista herido en un almohadón de un coche de primera)

GUARDIA 2°

¡A la casilla!

GUARDIA 1°

Y nosotros a recoger heridos hasta que vengan socorros.

BOLICHE

¿Pero qué es lo que he hecho yo?

JUANA

(Saliendo angustiadísima y dirigiéndose al grupo que conduce a Félix herido) ¡Félix! ¡Félix!

MOÑITOS

(Idem) ¡Hija, espera!

JUANA

(Viendo a Félix) ¡Ah!... ¡me le han matao!... (¡El: cobarde!) (Mirando a Ezequiel con rabia)

VIAJEROS

(Voces y gritos)

GUARDIA 1°

¡Calma, calma!

MUTACION

Colocación para el final del cuadro: Derecha del espectador, Félix, conducido en un almohadón por el Fogonero, el Guardafreno, el tío Risita y otros dos: Juana, desesperada a un lado, mirando con rabia a Ezequiel: la tía Moñitos procurando calmar a Juana; en el centro Boliche, sujeto por el Guardia 1° y asustadísimo llorando a gritos: los demás grupos como al principio, Ezequiel al extremo opuesto del grupo de Juana, observando cínicamente é imponiéndola silencio con señas apenas perceptibles: Juana, después de mirar a Ezequiel, como queda dicho, vuelve a arrojarse sobre Félix llorando: tía Moñitos y el Guardia 2° la quieren separar cuando cae el telón. Todo ello rápido, pero preciso y ajustado.

CUADRO CUARTO

Interior de la casilla. Primer término derecha, puerta que da a la vía; primero izquierda, otra que comunica con una alcoba, segundo término derecha, fogón bajo; al foro una mesita pequeña y sobre ella un queso entero; la cuna entre el fogón y la mesita.

ESCENA PRIMERA

La Tía Moñitos y el Tío Risita sentados al pie de la mesa, y Tomasa arreglando el fogón.

RISITA

Pero si lo peor es que está acobarda, entontecía.

MOÑITOS

La cosa no es pa menos; al volver en sí de aquel desmayo y encontrarse con el exprés descarrilao y ver a su novio como muerto entre cuatro hombres, ¡calcula si no es pa volverse loca del too!

RISITA

Y más desde que los obreros declararon que el descarrilamiento no había sido casual y que había dos rails desprendidos.

TOMASA

¡Y le echaron la culpa a Boliche! (Con pena)

MOÑITOS

¡Pues to eso la tiene como desequilibra!

RISITA

Sí, pero han pasao quince días... (Marcándolo mucho)

MOÑITOS

En los cuales no se ha separao de la cabecera de Félix, y hasta que el médico no le ha dao por hombre, ni ha dormío ni ha vuelto a ocuparse del niño a quien tanto cariño había tomao.

RISITA

¡Esa! ¡esa es la causa de to!

MOÑITOS

¿Qué dices?

RISITA

Lo que pienso ¡y ojalá me equivoque! a un hijo de otro no se le quiere de ese modo; por  un hijo de otro no deja una mujer perder su fama.

MOÑITOS

¡Entonces!...

RISITA

Ni sé lo que pienso ni lo quiero pensar, pero el chico, y el descarrilamiento, y lo acobarda que está la Juana... lo junto y armo un pisto aquí dentro, que me lo explica to y que me hace ver las cosas mu negras.

MOÑITOS

¿También tú crees como el juez que Juana sabe ó sospecha la causa del siniestro?

RISITA

Sí; ¡lo creo!... ¡pero como ella se ha encerrao en ese mutismo, nos vamos a volver locos tóos sin averiguarlo!

MOÑITOS

Ya ves lo que dice el médico, que no se la atosigue... que está... ¿cómo ha dicho?... como desequilibra... y que ahora una emoción fuerte cualquiera la podría volver loca de veras.

RISITA

Por eso el juez espera hasta que el médico deje declarar a Félix, y como ese no diga algo que dé luz, apretará a la Juana hasta sacarla la verdad.

TOMASA

¿No se va a levantar hoy Félix?

RISITA

Sí, pero el médico ha tenío miedo de que se repita el ataque de conmoción celeblal y toavía no le ha autorizao pa declarar.

TOMASA

Y a to esto el pobre Boliche en la cárcel. (Casi llorando)

RISITA

Pa lo que hacía aquí bien está allí.

TOMASA

¡Pobrecillo... y pué que esté sin comer!

RISITA

(Mirando por la puerta primera derecha) La Juana... que no nos vea cuchichear .. (A Tomasa) tú estate fuera al cuidao de los trenes... (A la tía Moñitos) tú a ver si se levanta Félix; yo voy al pueblo a hablar con el médico.

TOMASA

Llévele usté algo de comer a Boliche.

RISITA

Anda y que reviente.

TOMASA

(Muy afligida) ¡Pobrecito mío!... ¡tan guapo!... (Hacen mutis los tres; Risita y Tomasa, primera derecha, y Moñitos primera izquierda. Pausa)

ESCENA II

Juana entra muy triste por primera derecha; se acerca a la cuna: da un beso al niño; se sienta al lado con las manos en la cabeza

JUANA

¿Pero y hoy?... hoy, cuando este hombre se encuentre bueno y fuerte, cuando sea él quien me pregunte... ¿qué digo? A mis padres, al médico, al juez, al mundo entero he podido engañarles con mi silencio... a él... a él ni puedo ni quiero engañarle nunca. ¡Este es sufrimiento! (Pausa) «No sé si soy mala ó buena... no sé si aborrecer al padre de mi hijo es delito ó justicia... sólo sé que este pedazo de mi cuerpo lleva su sangre... y yo no puedo, no debo delatarle. (Pausa) Si yo no hubiera perdido aquel día el conocimiento hubiera puesto la señal de detención y el tren no hubiera pasado... ¡pero Dios me privó del sentido y no pude! (pausa) Si ese hombre hubiera huido; si no se acordase más de mí... pero cá... Seguro de que no he de delatarle se presenta ante todos tranquilo, sereno, hasta ayuda a la justicia para descubrir al criminal; me persigue, me acobarda con sus amenazas, y yo sin poder hablar. ¡Esto es para volverse loca! (Desesperada y llorando)

ESCENA III

Dicha, Moñitos y Félix, primera izquierda, pálido y andando pausadamente.

MOÑITOS

¿La ves? Llorando como siempre.

FELIX

¡Juana! (Acercándose a ella)

JUANA

¡Ah!... ¡Félix!

FELIX

¿Por qué lloras?

JUANA

(Titubeando) De... alegría al verte ya bueno.

MOÑITOS

¡No la hagas caso!

JUANA

(A Félix) ¿Estarás muy débil, verdad?

FELIX

Calcula; quince días de cama; pero ya pasó; y tú, enfermera, ya tendrás ganas de descansar. (Con cariño)

JUANA

Si yo estoy bien. (Fingiendo)

MOÑITOS

No lo creas, ¡esa idea, esa idea fija que la acobarda! (¿Por qué no la hablas tú a ver?)

JUANA

(¡Qué le digo, Dios mío, qué le digo!)

FELIX

(Tiene usté razón. Déjenos usté solos)

MOÑITOS

Vaya, ahora a arrullarse los tortolitos ¡bien se os puede dar la enhorabuena! (Mutis primera izquierda)

JUANA

(¡Qué martirio!)

(Música)

FELIX

Juana de mi vida,

ya estoy a tu lado,

ya ves que te quiero;

ven, dame un abrazo;

mírame como antes,

dime que me quieres,

mírame a tu lado

firme como siempre.

JUANA

(Sin oírle y recordando con tristeza las frases de la romanza del cuadro primero)

Encierran al que roba

y al que asesina,

y al que en defensa mata

la ley castiga.

FELIX

¿Qué dices? ¿Qué piensas?

¿Te alejas de mí?

¿.Es que no me quieres

como yo a ti?

JUANA

¿Tú a mí?

FELIX

¡Sí, a ti!

JUANA

¿Tú a mí?

FELIX

¡Sí, a ti!

JUANA

Por honrado y leal y valiente

en cuanto te vi,

te adoré con cariño profundo

y vivo por ti;

pero un hombre traidor y asesino

matarte juró,

y fingiendo que ya no te quiero

te salva mi amor.

Huye de mi lado,

salva así tu vida,

di que no me quieres

y estaré tranquila.

FELIX

Por bonita y leal y constante

quererte juré,

y casarme contigo te ofrezco

y lo cumpliré.

Nadie puede impedir que te adore

ni lo han de lograr

nadie intenta quitarme la vida

que es tuya no más.

JUANA

Calla, tengo miedo.

¿Y si alguien te oyera?

FELIX

No sé por qué puedes

temer que te quiera.

JUANA

Calla, no lo digas,

saberlo me aterra,

y es que por quererme

la vida te juegas.

FELIX

Juana, Juana mía,

no me hables así,

no temas a nadie

estando yo aquí.

JUANA

Vete, no te vea,

y no hables de amor,

no me martirices,

vete por favor.

(Juana y Félix a la vez)

JUANA

Ten compasión

de mi ansiedad,

vete, por Dios,

que tu vida en riesgo está.

FELIX

Alma de mi alma,

no tengas temor,

que si tú me quieres

te defiende nuestro amor.

JUANA

(Recordando como antes)

¡Maldito el mundo sea!

si así es el mundo.

FELIX

Si me quieres, Juana,

ven aquí,

y no me hables así.

JUANA

No me mires,

no te escucho.

(Juana y Félix a la vez)

JUANA

Vete pronto,

no pienses en mí.

FELIX

Calla, calla,

no me hables así.

(Hablado)

FELIX

(Sin comprender) ¿Pero qué quieres decirme?... qué hombre es ese cuyo recuerdo te espanta?

JUANA

Si me quieres no me preguntes... te he hablado así por prevenirte del peligro; tienes, tenemos un enemigo capaz de todo.

FELIX

Dime quién es y dejará de serlo. (Con energía)

JUANA

No; tu vida antes que todo; milagrosamente te has salvado, pero vive prevenido.

FELIX

Vaya, tienes que hablar. (Enérgicamente)

ESCENA IV

Dichos y Guardias 1° y 2°, a poco la Tía Moñitos.

GUARDIA 1°

(Entrando) Buenas tardes.

FELIX

Buenas.

GUARDIA 1°

Señor Félix, de orden del señor juez, tenga usted la bondad de seguirnos.

JUANA

(Asombrada) ¡Eh!

FELIX

(Idem) ¿Yo?... ¡Ah, será para declarar!

JUANA

Si está muy débil. Aun no puede ir...

GUARDIA 1°

El médico ha certificado, con fecha de ayer, que está usted en disposición y...

FELIX

Poco tengo que decir, pero vamos, (A Juana) Hasta luego.

GUARDIA 1º

Eso... la verdad... como a ustedes les conozco y me intereso... hasta luego no... porque va usted detenido.

FELIX

¡Eh!

JUANA

¡Imposible!

FELIX

¿Quién ha podido?...

JUANA

(¡Ah! ¡él ha sido!)

GUARDIA 1º

Eso es cosa del señor juez... nosotros...

FELIX

Sí, comprendo. Vamos. (Disponiéndose a seguirlos)

JUANA

(Interponiéndose) No, tú no vas; ¡no!

FELIX

¡Eh!

GUARDIA 2°

¡Vamos, Juana!

JUANA

¡No! ¡no! (Desesperada)

MOÑITOS

(Saliendo) ¿Qué pasa?

JUANA

¡Que se llevan a Félix preso! ¡Va preso!

MOÑITOS

¿Por qué?

GUARDIA 1°

Pero si es inocente, saldrá.

JUANA

¡Sí lo es!... y no puede estar ni un día en la cárcel, ó no hay justicia.

FELIX

No te asustes, mujer, yo voy tranquilo.

JUANA

Y yo contigo.

FELIX

(Deteniéndola) No, eso no.

MOÑITOS

¡No, hija, si no puedes andar!

JUANA

Padre, ¿dónde está padre?

MOÑITOS

¡En el pueblo!

JUANA

Vaya usté con él, madre; no le deje un momento; y padre, que venga padre a decirme lo que haya... ¡si tardan ustedes, me muero!

MOÑITOS

¡Si yo voy con él!

FELIX

¡Adiós!

JUANA

¡Félix! (Se abrazan y cuesta trabajo separarlos)

GUARDIA 1°

(Suplicante) ¡Juana!

GUARDIA 2°

¡Vamos! (Logrando separarle de Juana)

FELIX

¡Vamos! (Mutis todos menos Juana)

ESCENA V

Juana, a poco Ezequiel, después Boliche.

JUANA

(Llorando) ¡Fuerzas, Dios mío, fuerzas!... ¡Ya me faltan! ¿Qué habrá inventado ese hombre para perdernos?... ¿Hasta cuándo voy a ser débil?... ¡Ah, no! ¡Si condenan a mi Félix... todo... lo digo todo, aunque me maldiga mi hijo! (Con decisión se acerca a la cuna llorando. Pausa. Aparece Ezequiel en la puerta. Juana al verle da un grito y queda como petrificada) ¡Ah!

EZEQUIEL

¡Chis!

JUANA

¿A qué viene?

EZEQUIEL

¡Calma! Estamos solo?; ya ves que me sé quitar estorbos de en medio; tus padres lejos; Félix camino de la cárcel: a tu hermanilla la he despachado con un mandao al pueblo, los obreros en la curva, y tú y yo... ¡solos y frente a frente!

JUANA

Bien, pero... (Acobardada)

EZEQUIEL

¿Te quiés quedar libre de mí?

JUANA

Sí.

EZEQUIEL

¿Del todo?

JUANA

Y para siempre.

EZEQUIEL

Pues mientras tengas el chico no estarás libre del todo.

JUANA

¿Y qué? (Sin comprender)

EZEQUIEL

Que me lo des y me lo llevo, y puesto que no quiés ver al padre no volverás a ver al hijo nunca. (Con frialdad)

JUANA

¡Me propones! (Indignada)

EZEQUIEL

¡Borrarlo tó... y como si no hubiera pasao ná!...

JUANA

(Reprimiendo la ira: con calma aparente) ¡Duro es... muy duro, para una madre, y si fueras otro hombre... dudaría, que al fin eres su padre, pero siendo tú, no dudo... serías capaz de matarle!

EZEQUIEL

Pues eso de perderme a mí de vista y quedarte con él, que te se quite de la cabeza.

JUANA

Para llevártelo hacía falta que me mataras primero. (Con decisión)

EZEQUIEL

Ya me conoces; (Amenazador, pero con acento reprimido) quise matar a tu hombre y me faltó poco... pero ya caerá; lo he metió en la cárcel, y si me delatas, echas a presidio al padre de tu hijo... tú verás lo que haces. ¡No ves que te conozco! (Con presunción)

JUANA

¡Eso me pierde!

EZEQUIEL

¡Ea! No he venido a perder el tiempo, (Con malos modos) ¿Qué hacemos ? ¿Te vienes ó

me haces ese regalo pa siempre?

JUANA

Me lo tendrías que robar.

EZEQUIEL

¡La cuestión es dejarte sin él... conque venga!... (Se dirige a la cuna y Juana se interpone, sujetándole y entablando los dos una lucha)

JUANA

¡Quieto!

EZEQUIEL

¡Quita!

JUANA

¡Me haces daño!

EZEQUIEL

¡Venga el chico!

JUANA

¡Aunque me mates!

EZEQUIEL

¡Lo vas a lograr! ¡Se acabó! (Arrojándola lejos y abalanzándose a la cuna: en el momento que entra Boliche, y al verle, finge que estaba acariciando al niño)

JUANA

¡Ay, no! ¡Mi hijo!

BOLICHE

(Saliendo) ¡Agua! ¡Jamón! ¡Me ahogo!

JUANA

¡Ah!

EZEQUIEL

(Transición) ¡Pues es bonito el chico! ¡Rico! ¡Pues es bonito! ¡Je, je!

JUANA

(¡Ah, hijo!) (Corriendo al lado de la cuna)

EZEQUIEL

(A Juana, en voz baja ) ¡Esta noche dormirás en la cárcel!

BOLICHE

(Dando voces) ¡Que ya me han soltao! ¿Quién me da de comer?

EZEQUIEL

¡Lo dicho, dicho! (Desde la puerta. Mutis)

BOLICHE

(Qué antipático me es ese tío) ¡Uy, un queso entero! ¡Me lo como!

JUANA

(¡Gracias, Dios mío!) (Juana cae de rodillas al lado de la cuna y Boliche se sienta a la mesa, partiendo el queso)

MUTACION

CUADRO QUINTO

La misma decoración del primero: sin la cuna

ESCENA PRIMERA

Tomasa y Boliche.

TOMASA

¿Pero cómo te han soltao?

BOLICHE

¡Verás! Me llevaron a la cárcel del pueblo; allí no puede estar ninguna persona delicá del estómago, ¡qué nial se come! Los obreros me han salvao; sostienen que no puedo haber sido yo; en el pueblo tóos han declamo á mi favor; han dicho que soy tonto; por fin hoy ha llegado de Madrid el ingeniero de la línea y me ha preguntao muchas cosas de tornillos, sentao, traviesas, railes y le ha dicho al juez: «Hay que seguir otra pista; puede usté soltar a este imbécil bajo mi responsabilidad.» Mira, si hubieras sido tú el ingeniero le doy un beso al ingeniero.

TOMASA

¡Pobre Bolichito!

BOLICHE

¿Me quieres mucho, me vas a dar mucho de comer?

TOMASA

(Mirando a primera derecha) ¡Calla!

BOLICHE

(Asustado) ¡Eh!

TOMASA

Vienen... sí... y Félix...

BOLICHE

A ese le han soltao antes que a mí.

TOMASA

Viene el juez y los obreros. ¡Juana! ¡Juana! (Llamándola a voces. Mutis por la casa)

BOLICHE

Y el asentaor... a ese asentaor le tengo yo asentao en la barriga, (sale el tío Risita) ¿Qué pasa?

RISITA

No sé. El juez nos ha hecho venir a todos.

BOLICHE

Alguna deligencia.

JUANA

(Saliendo con Tomasa) ¿Qué es esto, padre? ¿Félix, qué pasa?

ESCENA II

Juana, Tomasa, la Tía Moñitos, Boliche, el Tío Risita, Ezequiel, el Juez, los Obreros, Guardias Civiles 1° y 2°.

Félix, el Escribano y el Alguacil, quedando colocados en este orden de derecha a izquierda (l)

(l) Primer término: Ezequiel, el Juez, Félix, tío Risita, Moñitos, Juana, Tomasa y Boliche. Segundo término: Guardias Civiles 1° y 2º, Escribano, Alguacil y Obreros.

BOLICHE

(Ofreciendo pan al Juez) ¿Usté gasta, Señor juez?

JUEZ

(Cariñosamente) Hola, buena pieza.

TOMASA

(A Boliche) (Ofrécele al Escribano)

BOLICHE

(No; que ese es capaz de acetar)

JUEZ

¿Juana López?...

JUANA

Servidora.

JUEZ

Queda usted detenida. (Asombro en todos y murmullos)

BOLICHE

¡Ella también!... pues vámonos tóos a la cárcel.

RISITA

 ¿Mi hija?

FELIX

¿Pero por qué?

JUANA

(¡Otra infamia de ese hombre!) (los tres simultáneamente)

JUEZ

De las resultantes del proceso, aparecen cargos graves contra usted.

BOLICHE

A ver, el niño, ¡á presidio también!

FELIX

Señor juez, me atrevo a pensar que hay una mano oculta que quiere embrollar el sumario.

JUEZ

Pronto lo hemos de ver y a eso hemos venido, a reconstituir el hecho.

BOLICHE

¿Como aquella noche? A ver, la cabra y el puchero.

JUEZ

(A Félix) Hay quien afirma que le vio a usted arrojarse de la máquina antes de descarrilar el tren.

FELIX

(Con energía) Miente quien lo diga; yo no me di cuenta de nada hasta que me encontré en esa casilla. ¿Quién se atreve a decirlo?

JUEZ

¡Un testigo presencial!

FELIX

¿Quién es? ¿dónde está?

JUEZ

Aquí delante: ¡el asentador!

TODOS

¡Eh!

JUANA

(¡Infame!)

BOLICHE

(¡Acusica; que no pueo ver a este tío!)

FELIX

(A Ezequiel) ¿Tú? ¡tú Sostienes!... (Amenazador)

EZEQUIEL

(Titubeando) Yo vi... que sin causa... el tren acortó velocidad... y te vi arrojarte de la máquina.

FELIX

¡Mientes!... ¡Ah!... (Ocurriéndosele una idea; a Juana) ¿Es este el hombre a quien tienes miedo?... ¡Di! ¡habla!

JUANA

No; ¡si yo no he dicho!... (Casi temblando)

JUEZ

(Se turba) (A Juana) Contra usted el cargo es más grave.

JUANA

(¡Todo lo espero de él!)

JUEZ

¿Usted es novia del maquinista?

JUANA y FELIX

Sí, Señor.

JUEZ

¡No me han engañado!

FELIX

¿Cómo?

JUEZ

Hacía días que no le escribía a usted... usted supo por alguien que iba a casarse con otra...

FELIX

¿Yo? (Sin comprender)

JUEZ

Y meditó usted un plan de venganza, y al saber que en el mismo tren en que iba su novio, pasaba su rival de usted... por deshacerse de ella y vengarse de él, levantó Usted los rails. (Quedan todos asombradísimos)

JUANA

¡Jesús!

RISITA

¡Mi hija!

FELIX

¡Ella!... ¡no! ¡todo eso es falso! ¿quién lo declara... quién?

JUEZ

¡Este anónimo!

BOLICHE

¿Quién lo firma?

JUANA

(¡Ya es demasiado, Dios mío!) (Casi desfallecida)

JUEZ

¿Qué pasó aquí antes del descarrilamiento?

RISITA

Encontramos a mi hija desmaya al lao del niño.

JUEZ

¡Ah, esta joven tiene Un hijo! (Con marcada intención)

MOÑITOS

(Ofendida) No, señor; es de su amo de Madrid; el jefe de vía y obras.

FELIX

(Asombrado) ¡Eh!... ¡si el jefe no tiene hijos!

MOÑITOS y RISITA

¡Cómo!

BOLICHE

(A Tomasa) (Malo; va a haber que buscar otro papá pa el niño)

FELIX

(A Juana) ¡Explícate, habla!

JUEZ

(Idem) ¡Su silencio de usted agrava su situación!

RISITA

¡Habla, hija!

JUANA

(Rompiendo a llorar y echándose en brazos de sus padres) ¡Si no puedo, padre!

TODOS

¡Eh!... (Pausa y silencio)

ESCENA ULTIMA

Dichos y Aniceto, con las alforjas al hombro completamente vacías.

ANICETO

(Dentro, cantando)

La moza que va...

(Saliendo) ¡Guas tardes!

TODOS

¡Buenas!

ANICETO

¡Cuánta gente! ¿Hay romería?

RISITA

¡Ah, sí! éste estuvo aquí aquella noche hasta momentos antes de pasar el tren... quizá viera algo que...

JUEZ

(A Aniceto) ¿Es cierto? ¿Vio usted algo extraño en la vía? (Aniceto no hace caso y el Juez dice enfadado) Le pregunta a usted el juez.

ANICETO

Pues yo, como ver, sí que vi... pero como naide me lo ha preguntao...

TODOS

(Con ansiedad) ¡Ah! (Todos le miran con gran interés)

JUEZ

Diga lo que viera.

ANICETO

Pues yo salí de aquí pa tomar el tren en Villalba, y como después que la carretera tuerce el recodo ya va pareja con la vía, pues me chocó ver a un hombre corriendo y mirando como si tuviá miedo de que le vieran.

BOLICHE

¡El que yo vi corriendo!

ANICETO

De pronto se paró, y con una herramienta se puso a desprender un cacho de la vía.

TODOS

¡Ah! (Con alegría)

ANICETO

Yo pensé que sería un obrero... porque por allí andaban recomponiéndola esos días, pero a aquellas horas y tan deprisa... y luego, cuando supe en Madrid la cosa, pues dije, digo, esa es la cosa; lo que yo vi. (Pausa)

JUEZ

¿Y reconocería usted a aquel hombre si lo viera? (Dando importancia a la pregunta, cuya contestación aguardan todos con ansiedad)

ANICETO

¡Anda, ya lo creo!

EZEQUIEL

(¡Maldita sea!)

ANICETO

No se me despinta, no; hasta he soñao con él.

BOLICHE

(¡Ni que fuá su novia!)

ANICETO

Era noche de luna y le daba de lleno en la cara. ¡No se me despinta!

JUEZ

¿Es este chico? (Por Boliche)

BOLICHE

¡Y dale!...

ANICETO

(Mirando a Boliche) ¡Este es!... (Boliche retrocede asustado; todos miran a Boliche) Este es amigo mío.

BOLICHE

¡Ahí ¡Vaya un susto!

ANICETO

¡Y a aquél no le había visto nunca! No es del pueblo.

JUEZ

Vea usted entre todos los presentes si reconoce usted a aquel hombre.

FELIX

(Con gran interés) ¡Sin miedo!

JUEZ

¡Sin titubear!

RISITA

¡Fíjate bien!

JUEZ

Mírelos usted despacio. (Pausa) ¿Está presente?

(Aniceto habrá avanzado mirando a los obreros y al llegar al centro del escenario dice muy tranquilo viendo a Ezequiel)

ANICETO

¡Este! ¡Este era!

TODOS

¡Ah!

FELIX

¡Cobarde! (Tratando de echarse sobre Ezequiel)

GUARDIA 1º

(Deteniéndole) ¡Quieto!

BOLICHE

(Abriéndose paso entre todos) ¡Fuera! ¡A ver! Este... ¡Este era el automóvile!

JUEZ

(A Aniceto) ¿Está usted seguro? Su acusación es terrible.

ANICETO

¡No me equivoco! Lo puedo jurar y lo juro. Este era.

EZEQUIEL

(Desesperado y fuera de sí) Sí, yo... Para matar a ese hombre que me roba el cariño de esta mujer. (Por Félix y Juana)

FELIX

¡Tú! (Mirando a Juana)

JUANA

(Adelantándose) Ahora sí puedo hablar; ¡despréciame, aborréceme! (A Félix) ¡Este hombre es el padre de mi hijo! (Por Ezequiel)

FELIX

¡Tu hijo! (Asombrado)

RISITA

¡Era ella! (Con pena)

MOÑITOS

¡Hija! (Llorando)

BOLICHE

(A Tomasa) ¿Ves? ¿Ves? (¡Si tengo yo un paladar, digo, un olfato!)

JUANA

En la carta que te escribí a Madrid y que te dejó este (Por Aniceto) en tu casa, allí con  malas letras y con buenas ideas encontrarás cuanto necesitas saber antes de despreciarme.

EZEQUIEL

(A Félix) Ha sido mía; ahora si la quieres muérete de celos. (Provocativamente)

JUEZ

¡Basta! (A la pareja) ¡Atad a ese hombre!

BOLICHE

¿Le van a atar? ¡Uy, en cuanto le aten qué bofetá le atizo!

GUARDIAS

(A Ezequiel) ¡Vamos! (Hace mutis Ezequiel conducido por los Guardias y detrás el Juez, el Escribano y el Alguacil)

JUANA

(Con dignidad) ¡Te pierdo por salvar a mi hijo! ¡Adiós, Félix. (Angustiadísima)

FELIX

(Después de dudar unos segundos) Sí, adiós... para siempre. ¿Por qué no me dejaste morir?

(Mutis Félix muy despacio, por el foro, con los obreros)

JUANA

(Echándose en brazos de su madre) ¡Madre!

MOÑITOS

(Llorando) ¡Hija mía!

TOMASA

(Idem) ¿Y se va? (Casi llorando)

BOLICHE

¡Cualquiera tiene esas tragaderas!

TOMASA

Habla tú, y eres capaz de tragarte un tren entero.

BOLICHE

Un tren sí, pero un chico no; ¡que no te se olvide el encarguito!

TELON

Información obtenida en:

https://archive.org/details/laguardabarreraz28422torr